Polémica
Isabel Pantoja, en busca (otra vez) del dinero perdido
Embargos de Hacienda, citaciones judiciales, el futuro de la tonadillera se ve negro, a juzgar por la cantidad que debe
EI cartero de Medina Sidonia no deja de llevar malas noticias a Cantora: cartas certificadas de Hacienda y de los juzgados, notificando embargos, inspecciones, reclamaciones de deudas y señalamientos de juicios... Isabel Pantoja, está en un sinvivir y, cada vez, más sola.
Desde que fuera condenada, en 2007, por blanqueo de capitales a dos años de cárcel y al pago de una multa superior al millón de euros, su situación económica, fiscal y judicial es desesperada. La millonaria deuda que arrastra desde entonces con entidades bancarias y el fisco han puesto en peligro la finca familiar de Cantora, garantía de pago de los cerca de 4 millones que les adeuda.
Mientras pleitea con la Agencia Tributaria, que ya la multó en 2012 con cerca de 1.800.000 euros, se enfrenta a una inspección que podría llevarla de nuevo a la cárcel y poner en riesgo el resto de su patrimonio. Hace unos días se conocía una nueva anotación de embargo de Hacienda sobre su parte de Cantora, de 75.263 euros, lo que eleva la cantidad que debe a 1.514.080 euros y seguirá subiendo si, como parece, ahora se investigan sus últimos diez ejercicios fiscales. En el foco del fisco está una década complicada para Isabel Pantoja que, condenada por blanqueo de capitales, hizo numerosas operaciones financieras que ahora están siendo investigadas. Isabel Pantoja vendió en esos años gran parte de su patrimonio inmobiliario, hipotecó otras propiedades y obtuvo una gran cantidad de dinero prestado.
Algunas de esas operaciones ya se investigan en los juzgados. Entre ellas, los préstamos realizados por particulares que le permitieron obtener liquidez cuando estuvo presa y la venta, en 2015, de su mansión de Marbella a una sociedad, radicada en un paraíso fiscal, para evitar el embargo de una constructora a la que Isabel debía más de 100.000 euros. Isabel, a la que se acusa de insolvencia punible y se le solicita una pena de tres años de prisión, deberá afrontar el próximo marzo el juicio. Aunque lo que preocupa es la condena a prisión, se le exigirá el pago de los 114.000 que dejó de pagar a la constructora Hormofer, otros 10.800 euros en concepto de multa y los intereses devengados.
También se reclama a Isabel Pantoja, judicial y extrajudicialmente, los cerca de 800.000 euros que, según su hijo Kiko Rivera, le prestaron amigos y conocidos para hacer frente a la multa de 1,1 millones impuesta por el caso Blanqueo. Entre ellos, se encuentra una octogenaria, conocida como Loli «La quiosquera», que trata de probar que le transfirió cerca de noventa mil euros a la tonadillera para evitar la cárcel. Ella, a diferencia de otros damnificados, no le dio el dinero en efectivo. Aún así, y según informó Antonio Rossi, otros afectados «se ha unido para reclamar a Isabel Pantoja» y aunque aún no han emprendido acciones legales, se buscan otros 500.000 euros que le prestaron y también «hay un despacho de abogados que a finales de 2020 remitía un burofax solicitando a Pantoja una cantidad cercana a los 100.000 euros».
Las cantidades cuadran. Por eso, Kiko Rivera no entiende cómo, si habían recaudado cerca de un millón de euros, su tío Agustín le pidió, en 2015, mientras su madre estaba en la cárcel, que avalara con su parte de la finca que le dejó Paquirri una nueva hipoteca de 1,1 millones, a la que no se hace frente desde hace año y medio. Ese es el motivo por el que, en medio de su conflicto familiar, el Dj denunció a su tío por apropiación indebida, estafa y administración desleal.
Garantía de pago
Aunque Cantora lleva hipotecada, con el beneplácito del DJ desde 2002, a beneficio de Pantomar S.L, una empresa de la cantante, actualmente es la garantía de pago de más de tres millones de euros, que van aumentando con los intereses de demora. Sorprende que Pantoja prefiera hipotecar el legado de Francisco Rivera «Paquirri» y la herencia de su hijo antes que otras propiedades privativas como el piso y local de Sevilla, los áticos de Fuengirola o la casa que posee en El Rocío.
Sin expectativas de ingresos por rendimientos profesionales a corto plazo, no tiene gira ni programas a la vista, difícilmente podrá hacer frente a estas deudas.
✕
Accede a tu cuenta para comentar