Antonio Tejado siempre estuvo en el centro de las sospechas de María del Monte

El caso de Antonio Tejado no solo ha puesto la atención de la crónica social sobre María del Monte y su pareja Inmaculada Casal, sino que ha distanciado a la familia llegando a formar “dos bloques”. El pasado mes de agosto se daba a conocer que un grupo de cinco encapuchados había asaltado de manera violenta la casa de la cantante en Sevilla. En febrero se procedió a la detención de su sobrino acusado de ser el “autor intelectual” del robo. Sin embargo, la propia María del Monte habría tenido sus sospechas desde el primer momento.

Este jueves en “Espejo Público” se han revelado los pasos que siguió María del Monte que le habrían conducido a una situación familiar muy tensa. “La información que tengo de la propia familia es que desde que se llevó a cabo la detención ella tiene esa sospecha y así se lo hace saber”, arranca Anabel Gil exponiendo en el programa de “Antena 3”. “Para ella su mayor satisfacción sería que su sobrino no tenga nada que ver”, proseguía revelando que la folclórica estaría esperando a que las autoridades den los siguientes pasos.

Desde que se conoce la detención de Antonio Tejado su tía ha hecho hincapié en que se debe respetar la presunción de inocencia, pero sus sospechas estaban fundamentadas desde hace mucho tiempo: “Tras el robo levantó los teléfonos para conocer la información que tenía la prensa”, han seguido diciendo desde el programa. Sin embargo, María del Monte no habría sido la única que habría tenido a su sobrino en el centro. Fuentes de la policía han asegurado que el nombre de Antonio Tejado estaba en la lista de sospechosos desde el inicio, pero trataron de mantenerlo todo “muy en secreto” porque no era una información que la familia quisiera dar a la prensa.

Esta nueva información pone en duda la reciente petición que Antonio Tejado habría hecho para poder reunirse con su tía. El joven habría visto la declaración de María del Monte, una vez que se filtró a la prensa, y habría tomado una firme decisión para cortar cualquier lazo que pudiera seguir teniendo con la artista: “Él no quiere hablar con ella porque siente que ella lo ha condenado”, sentencia Anabel Gil.