El diario de Amilibia: ¡Queremos más, mucho más!

Han alzado los brazos en los balcones como los ciclistas cuando cruzan vencedores la meta, pero hasta los palmeros más cualificados no tenían muy claro si su Amado Líder había ganado o perdido. Así que el descriptible entusiasmo del personal estaba amortiguado por un «ya veremos». Lo único que parece estar claro en la nueva noche que nos acecha es que nos encanta votar, y nada más cerrarse las urnas, ya estamos ahítos de nuevas elecciones. El circo nacional ha logrado alucinar al gran circo europeo con un número deslumbrante: hemos dejado la gobernabilidad en manos de un golpista exiliado en Waterloo, Puigdemont, que en el caso improbable de que volviera a España, la Policía tendría que esposarlo para llevarlo a la trena.

Pero en el circo nacional siempre estamos dispuestos a superar lo insuperable, cumpliendo con el «más difícil todavía». Tenemos al futuro Gobierno en el aire, con Feijóo y Sánchez emulando a Burt Lancaster y Tony Curtis en «Trapecio» con el triple salto mortal y tirabuzón a veinte metros de altura. Contengamos la respiración. Tampoco tenemos competencia en la magia negra: Sánchez, el nuevo Merlín, ha resucitado tantas veces como Kiko Rivera, y sin convertirse en zombi. Lázaro Sánchez se dice a sí mismo «levántate y anda», y él se levanta y anda, y cómo anda: derramando lisura por la vereda que se estremece al ritmo de su cadera, como cantaba María Dolores Pradera.

Eso sí, si hay nuevas elecciones, queremos vídeos frescos y más divertidos. Queremos, por ejemplo, a la Yoli vestida de Barbie, a Teresa Ribera perreando y a Él lavando platos. Feijóo le ha pedido seriamente al PSOE que no bloquee, porfa. Así que lo queremos disfrazado de Melchor: el líder pepero todavía cree en los Reyes Magos.