Caso Mario Biondo
Patricia Pardo: "A Raquel Sánchez Silva habrá que dejarla en paz"
La presentadora del matinal de Telecinco defiende a su compañera tras las declaraciones de los padres de Mario Biondo
Doce años después de la trágica muerte de Mario Biondo, marido de la presentadora Raquel Sánchez Silva, la familia del cámara de televisión vuelve a alzar la voz.Una nueva resolución de la Audiencia de Madrid ha planteado que el fallecimiento de Mario, ocurrido en 2013, podría no haber sido un suicidio. Tras tantos años de silencio y de dolor contenido, sus padres han decidido expresar públicamente su deseo de que se investigue a fondo lo sucedido.
"Solo queremos saber quién ha matado a mi hijo y por qué", ha señalado su padre, dejando entrever que aún no acepta la versión oficial de la justicia española. En 2016, la causa se cerró concluyendo que la muerte de Mario Biondo fue un suicidio, pero la familia intentó reabrir el caso en 2022, alegando que la investigación inicial había sido deficiente. Finalmente, la causa quedó archivada nuevamente, y la Audiencia de Madrid ha rechazado la última apelación de los padres, argumentando que se trata de una "cosa ya juzgada".
Sin embargo, más allá del ámbito judicial, las palabras de los progenitores de Mario han generado un foco mediático y personal: las dudas se han proyectado sobre Raquel Sánchez Silva. La madre del fallecido ha afirmado que "ella debería estar de nuestro lado", dejando entrever cierto reproche hacia la presentadora, quien ha optado por el silencio ante los medios y ha asegurado que tomará medidas legales si se vulnera su derecho a la intimidad.
Desde el plató de "Vamos a Ver", Patricia Pardo ha querido matizar la situación en defensa de Sánchez Silva: "En su momento, ella ya emprendió acciones legales, la Justicia le dio la razón y los padres de él fueron condenados por un delito de lesiones por daños morales". La periodista recuerda que, aunque el dolor de los padres es comprensible, Raquel ha reconstruido su vida y hoy tiene dos hijos pequeños. "Ni una sola sentencia la ha señalado a ella. Entiendo que ese dolor, esa frustración y esa impotencia les lleve a explorar todas las vías posibles, pero creo que a ella, en algún momento, habrá que dejarla en paz", concluye Pardo.
La tensión entre el recuerdo de Mario Biondo y la vida actual de su viuda muestra cómo un hecho trágico puede permanecer en el centro del debate mediático incluso una década después. La familia, atrapada en la búsqueda de justicia, no deja de cuestionar lo que consideran vacíos en la investigación; mientras tanto, Sánchez Silva se protege tras su silencio y las decisiones legales que ha emprendido.
El caso ha vuelto a encender la curiosidad del público y de los medios, pero también pone en relieve el delicado equilibrio entre el derecho a la verdad de unos padres y la necesidad de intimidad de una mujer que ha rehecho su vida. Doce años después, la sombra de Mario Biondo sigue presente, y con ella, la compleja red de emociones y responsabilidades que todavía no ha encontrado un cierre definitivo.