Herederos

Hijos de poder: Paloma Segrelles, la heredera que brilla sin deslumbrar

Es anfitriona de encuentros culturales y figura clave en los circuitos más exclusivos de Madrid

Paloma Segrelles
Paloma SegrellesGtres

Paloma Segrelles aprendió desde niña el arte de brillar sin deslumbrar. Educada entre salones de embajadas, reuniones políticas y almuerzos con intelectuales, es heredera no solo de un apellido sino de un estilo de influencia que se ejerce sin elegancia pero sin alzar la voz. Hija de Paloma Arenaza, fundadora del Club Siglo XXI, donde las reuniones culturales eran el paisaje cotidiano. Su madre tejió durante décadas una red de poder «blando» entorno al club. Licenciada, políglota y madre de dos hijas, Paloma y Tiziana, ha sabido combinar su vida personal con discreción hasta que los focos se encendieron con su divorcio. Estuvo casada con Emilio Álvarez de las míticas bodegas Vega Sicilia.

Actualmente preside la sección juvenil del club Siglo XXI, pero su papel trasciende lo institucional. Es anfitriona de encuentros culturales y figura clave en los circuitos más exclusivos de Madrid. No da titulares fácilmente porque nunca ha buscado la exposición pública más allá de promocionar su labor cultural. Este año, los veranos tediosos en Sotogrande (algunos lo llaman «Tostón Grande») tienen con ella, residente habitual, un aliciente. El rumor de que ha empezado una relación con el magnate asturmexicano Pérez Simón resuena con fuerza, un hombre cuya persona se asociaba hasta hace poco con la de la abogada de famosos Teresa Bueyes.