Opinión

Nada con sifón: A Yamal le crecen los enanos

Con los enanos pasa como las putas: muchas también exigen que les dejen vivir del negocio de su cuerpo, libres de chulos y alcahuetas

El futbolista Lamine Yamal atiende a los medios de comunicación tras firmar su contrato con el FC Barcelona, a 16 de julio de 2025, en Barcelona, Cataluña (España). El delantero renueva con el FC Barcelona hasta 2031, convirtiéndose en uno de los jugadores mejor pagados del club. El acuerdo, que entró en vigor el 13 de julio cuando cumplió 18 años, asegura su continuidad en el equipo hasta esa fecha. El salario base será de 15 millones de euros anuales, con la posibilidad de aumentar a 20 mil...
Lamine Yamal Lorena SopênaEuropa Press

Leo: «Estudian demandar a Lamine Yamal por contratar enanos en su fiesta». El extremo del Barça organizó una fiesta extrema de joven nuevo rico y todavía le llueven los palos. Junqueras podría salir en su defensa prometiendo que así se celebrarán todos los aniversarios en Cataluña, incluyendo el 1-O, una vez conseguida la financiación singular.

No creo que la posible demanda tenga mucho recorrido: uno de los enanos, no sé si cantante o saltimbanqui, ha confesado que se les pagó un buen dinero y además fueron tratados con respeto en todo momento, incluso les dieron un trozo de la enorme tarta decorada con pistolas y billetes, digna de la boda de Al Capone.

Tampoco Lamine les obligó a ponerse la camiseta del Real Madrid para hacer unas risas ni a vestirse de toreros como en el show del Bombero Torero. Las personas pequeñas o con enanismo han manifestado en muchas ocasiones que les dejen ganarse la vida en paz. Con los enanos pasa como las putas: muchas también exigen que les dejen vivir del negocio de su cuerpo, libres de chulos y alcahuetas. ¿La frase bandera de las abortistas no era «en mi cuerpo mando yo»? ¿No está vigente para enanos y enanas?

Por cierto, hablando del putiferio, dice Ayuso: «Los indepes ya no son socios de Sánchez, suben de categoría: son sus chulos». O sea, que serán voces autorizadas en el debate sobre el proxenetismo. Leo también que en la fiesta de Lamine hubo «chicas de imagen» a 20.000 euros. ¿Chicas florero? ¿Chicas para que los chicos se hagan selfis y los cuelguen en las redes en plan «La Carlota se enrolla que te cagas»? Parece mucha pasta por tan poco empeño. Estos «lamines» tendrían mucho que aprender de los austeros Koldo y Ábalos, que pagaban menos y además las redimían: mujeres públicas en empresas públicas.