Coronavirus

La pandemia se extiende por América

El peligro es máximo debido a que los precarios sistemas sanitarios no soportarán mucho más tiempo, si los números siguen aumentando.

Estrictos controles en Buenos Aires por el endurecimiento de la cuarentena
Policías realizan controles este lunes en la Estación Ferroviaria de Constitución en la ciudad de Buenos Aires (Argentina).Juan Ignacio RoncoroniEFE

Romina tucumana –norte de Argentina-, regenta un pequeño comercio en el barrio de Palermo en Bueno Aires. Venden todo tipo de mates, de cuero estampados en plata, las bombillas mediante la cuales uno sorbe la hierva empapada en agua ardiendo. Desde que abrió hace un año fue un éxito. Mucho extranjeros se acercan atraídos por esos rudimentarios cuencos que los argentinos adoran. Sin embargo desde que comenzó la pandemia el negocio se vino abajo. Al principio les obligaron a cerrar, después permitieron apertura con restricciones y ahora vuelta atrás, clausura hasta dentro de tres semanas. " Es la ruina” asegura Romina.

Es solo uno de los 100.000 negocios que tendrán que volver a echar la verja abajo. Se calcula que 20.000 de estos nunca volverán a abrir. A partir de mañana, el gobierno endurece la cuarentena, vuelve a la fase uno. El gobierno de Alberto Fernández fue uno de los primeros en decretar el confinamiento, de hecho es el país con más días de cuarentena en el planeta, 103 días “en guerra”, pero parece que pese a todo la batalla no la están ganando ¿Qué falló?

Por ahora la estrategia de la administración peronista pasa por la reclusión pero no hay otras medidas que acompañen. Apenas se hacen controles –menos de 300.000- comparado por ejemplo el millón de Chile, por lo que las cifras podrían ser mucho mayores. Además en las villas miseria y la provincia de Buenos Aires, zonas muy vulnerables, la gente no respeta las reglas, tiene que salir a trabajar o por lo menos, a buscar la comida que reparten en las ollas populares. Y es que con un 40% de pobreza el hambre es el hambre.

Durante las próximas tres semanas tan solo abrirán los comercios esenciales, se revocaran los permisos de transporte volviéndose más estrictos, solo para profesiones esenciales. Mayores controles en los transportes públicos y en los accesos de salida de Buenos Aires. Tampoco se podrá hacer deportes por las noches, ni por supuesto visitas o reuniones. En otras palabras, volver al principio. Y la paciencia del pueblo que se agota.

El problema es que pese a las cifras son menores comparadas con otros países vecinos, el brote sigue creciendo y el débil sistema sanitario podría colapsar. En Argentina hay 59.933 y 1.245 fallecidos con una media que ronda los 30 muertos por día cuando hace tres meses eran cuatro decesos cada 24 horas.

América epicentro de la Pandemia

Las cifras siguen imparables medio millón de muertos y más de diez millones de casos en el mundo. Y es que mientras en Europa la peste parece estar controlada en América la pandemia sigue expandiéndose. El peligro es máximo debido a que los precarios sistemas sanitarios no soportarán mucho más tiempo, si los números siguen aumentando. Eso por no hablar de la economía. El coronavirus ha sido “la estocada final” para el continente americano.

Brasil sigue siendo récord con más de 1200 muertos por día y un presidente Jair Bolsonaro que sigue minimizando los efectos de la pandemia. Es el segundo país más afectado después de EE UU. Chile que comenzó con cierta apertura y ahora el presidente Sebastián Piñera impone “mano dura”, tuvo 66 nuevos fallecidos en las últimas horas -5.575 en total-. Es el séptimo país en afectados.

Perú es otro de los países más “golpeados” –el cuarto a nivel global- ya tiene más de 278 mil casos confirmados y 9000 muertos. Sin embargo el presidente Martín Vizcarra anunciará cierta apertura para reactivar la economía. Se calcula que el PIB del país andino podría caer hasta un 50%. De nuevo la compleja balanza entre salud y economía, con la que los presidentes tienen que hacer malabarismos.

Por su parte Bolivia extendió un mes más la cuarentena ante el aumento de casos de coronavirus. El Gobierno interino publicó un decreto que amplía la medida “ante el incremento del contagio comunitario y el aumento de casos positivos”. La enfermedad suma 29.423 casos y 934 decesos en el país.

El norte infectado

Más al norte en México “la peste” ha dejado un paso de 216.852 casos positivos acumulados y 26.648 decesos. Y otro presidente López Obrador, que parece vivir en un mundo aparte al de sus compatriotas. “Los mexicanos están por salir de la pandemia de la COVID-19, por lo que la economía necesita reactivarse”, afirmó el presidente Andrés Manuel López Obrador. Se espera que en las próximas semanas Obrador se reúna en EEUU con el presidente Donald Trump.

Y es precisamente en Estados Unidos donde se libra “la madre de todas las batallas”. La cifra de muertes por coronavirus ha estado rondando las 600 por día a últimas fechas, comparadas con unas 2.200 en el pico alcanzado en abril. Algunos expertos dudan que se alcance ese nivel nuevamente debido a los avances en tratamiento y prevención.

De hecho al menos once estados de EE UU dieron marcha atrás en sus planes de reapertura por el avance del coronavirus. La pandemia ha causado unas 125.000 muertes y ha infectado a casi 2,5 millones de personas en Estados Unidos, según un conteo de la Universidad Johns Hopkins. Pero las autoridades de salud creen que el número de casos es 10 veces mayor.