Donald Trump

Por qué Trump está ingresado en un hospital militar

El Walter Reed está considerado el mejor y más importante centro médico de Estados Unidos y atiende a la élite política de Washington

Médicos del hospital Walter Reed en el pueblo de Bethesda, Maryland
Médicos del hospital Walter Reed en el pueblo de Bethesda, MarylandJacquelyn MartinAP

El Centro Médico Militar Nacional Walter Reed, donde está ingresado el presidente Donald Trump desde el pasado viernes, es uno de los centro hospitalarios con mejor reputación en Estados Unidos. Se trata de un hospital militar que pertenece a la Armada de EE UU. Lleva el nombre de un médico y militar norteamericano que vivió en el siglo XIX que dirigió la investigación que descubrió que la fiebre amarilla es transmitida por mosquitos

Trump y otros altos funcionarios del país acuden a este centro hospitalario para hacerse revisiones médicas. La alta cualificación de su personal y el éxito de sus investigaciones hacen que tradicionalmente el Walter Reed sea el lugar de referencia para la élite política de Washington. Allí son atendidos miembros del Congreso y del Tribunal Supremo. La primera dama Melania Trump fue tratada en Walter Reed por una afección renal en 2018.

La clínica se encuentra situada en Maryland, cerca de la ciudad de Washington, y fue inaugurada el 15 de septiembre de 2011 en el campus del hospital naval en Bethesda. La primera sede de esta red hospitalaria fue inaugurada por el presidente Franklin D. Roosevelt en 1938. En 1945, al final de la Segunda Guerra Mundial, se alojó a 2.464 marines heridos.

En el campus también operan la Escuela Médica de la Marina, la Escuela Naval de Odontología y el Instituto de Investigación Médica de la Marina. Fue en este hospital donde Trump utilizó por primera vez en público la mascarilla mientras realizaba una visita a las tropas que estaban siendo tratadas allí.

Este hospital dispone de una suite presidencial totalmente equipada que permite al presidente continuar con sus funciones oficiales. En el Walter Reed se le practicó al presidente John F. Kennedy la autopsia el 22 de noviembre de 1963, bajo la atenta mirada de treinta oficiales. También fueron ingresados los presidentes Ronald Reagan y Eisenhower.