“La estrategia de Trump es sembrar suficientes dudas y aguantar hasta el 14 de diciembre”

Más de 60 millones de personas ejercieron el voto por correo en Estados Unidos. Ante los resultados en ciertos Estados bisagra, la campaña de Trump ha iniciado una serie de maniobras judiciales para cuestionar la legitimidad de los comicios. La estrategia de Trump parece ser aguantar y sembrar suficientes dudas hasta el primer lunes después del segundo miércoles de diciembre, en el caso de este año el 14 de diciembre, día en el que se tiene que constituir el Colegio Electoral. Si el presidente y su equipo de abogados consigue su cometido, algunos parlamentos estatales podrían cuestionar la legitimidad del resultado electoral y nombrar a sus propios delegados.

La siguiente fecha clave es 3 de enero cuando se constituyen las nuevas cámaras, y el día 6 en el que se reúnen el Senado y la Cámara de Representantes en sesión conjunta para contabilizar los votos de los delegados. En este caso, podríamos tener dos delegaciones diferentes provenientes del mismo estado, en cuyo caso sería el vicepresidente Mike Pence, como presidente pro tempore del senado, el encargado de elegir la delegación legítima.

Si Pence decidiera elegir a los delegados escogidos por los parlamentos estatales en vez de los resultantes de los comicios, la presidenta de la Cámara de Representantes, la demócrata Nancy Pelosi, podría ordenar la retirada de los diputados evitando así la contabilización oficial del voto del colegio de delegados e impidiendo la elección de un nuevo presidente. Finalmente, la fecha final es la del 20 de enero, día en que finaliza el mandato presidencial. Si no se ha elegido un presidente por vía ordinaria, la presidencia en funciones caerá sobre la presidenta de la Cámara de Representantes.

El caos podría ser el resultado si ningún candidato acepta la derrota, dando pie a una crisis política y constitucional de difícil solución.