El Estado Islámico proclama su “gran victoria” en Mozambique

“Los muyahidines del Estado Islámico asaltaron una importante ciudad costera (Palma) en la zona de Cabo Delgado, en Mozambique, después de un ataque a gran escala que mató e hirió a las fuerzas musulmanas y cristianas y causó un gran alboroto y la alegría de la noche”.

De esta manera describe el Estado Islámico el ataque, que aún mantiene, a la ciudad mozambiqueña de Palma, que ha provocado más de 8.000 los desplazados, según las últimas cifras. Desde la pérdida del “califato” en Siria, se trata de uno de los ataques más importantes a nivel territorial llevado a cabo por la banda yihadista, en concreto por su franquicia en la zona, al Shaabad.

En el número 280 de la revista “Al Naba”, publicación oficial de Isis, los terroristas hacen un gran espliegue para dar cuenta de su gran victoria e ilustran su portada con la foto de un combatiente en la zona. En el interior, publican La fotografía de un helicóptero que evacúa a ciudadanos occidentales, probablemente trabajadores de las instalaciones gasísticas de la zona.

El ataque de Daesh ha sido brutal y por las redes circulan vídeos que muestran cuerpos decapitados, desmembrados y con múltiples cortes profundos en todo el cuerpo, así como brazos, cabezas y torsos esparcidos por el suelo.

La situación de seguridad en Palma sigue siendo “volátil”, según las agencias, pero las informaciones son difíciles de verificar debido a que las telecomunicaciones no funcionan en la localidad, que sigue controlada por los atacantes.

Según “Al Naba”, los yihadistas irrumpieron en la ciudad y tomaron el control de la sede del gobierno, bancos y fábricas comerciales, después de que las fuerzas del ejército huyeron. “El gobierno --añaden-- ha cortado todas las redes de comunicación desde el comienzo del ataque en un intento de ocultar sus grandes pérdidas y mantener un perfil bajo sobre lo que sucedió dentro de la ciudad, que ocupa un lugar económico importante en la región debido a su proximidad a proyectos económicos de los países cruzados (cristianos)”.

Se jactan del “estado de conmoción” que han causado a nivel internacional: “el ataque está bien planeado y organizado, con el uso de sofisticadas tácticas militares”. De hecho, se mantienen paralizadas las instalaciones gasísticas de la importante reserva que hay en la zona, objetivo de los terroristas para visualizar su operatividad en Mozambique.