Medioambiente

Francia prohibirá los vuelos nacionales que se puedan hacer en tren en menos de dos horas y media

La medida para reducir las emisiones de carbono llega cuando la industria aérea se tambalea por el coronavirus

Un avión de Air France Airbus A350 aterriza en el aeropuerto de Charles-de-Gaulle
Un avión de Air France Airbus A350 aterriza en el aeropuerto de Charles-de-GaulleCHRISTIAN HARTMANN

Uno de los sectores más contaminantes por las emisiones de carbono es el del transporte aéreo. Se cree que un vuelo es siete veces más contaminante que un mismo trayecto en tren a alta velocidad. La llamada huella ecológica se quiere erradicar o reducir al máximo posible. En Francia, con la preocupación por el cambio climático al alza, han tomado medidas este mismo fin de semana.

Sin embargo, el proyecto de ley no está exento de controversia, pues uno de los sectores que más ha sufrido por la pandemia de coronavirus es, sin lugar a dudas, el turismo y el transporte aéreo de pasajeros debido a los cierres fronterizos y restricciones de viajes.

A última hora del sábado, los diputados franceses votaron en la Asamblea Nacional a favor de abolir todos los vuelos nacionales de rutas que puedan cubrirse en tren en menos de dos horas y media después de un intenso debate. El Gobierno del presidente de Francia, Emmanuel Macron, busca reducir las emisiones de carbono incluso cuando la industria del transporte aéreo se tambalea por la pandemia de coronavirus.

Es decir, la ruta entre París y Nantes quedará suspendida (2 horas y 10 minutos en tren), al igual que los vuelos entre París y Burdeos (2 horas y 14 minutos). Tampoco se podrá ya volar entre París y Lyon, la tercera ciudad más poblada de Francia, pues en tren se tarda aproximadamente 2 horas.

La medida es parte de un proyecto de ley climático más amplio que tiene como objetivo reducir las emisiones de carbono francesas en un 40% en 2030 desde los niveles de 1990, aunque los activistas acusan al presidente Emmanuel Macron de diluir promesas anteriores en el proyecto de ley.

La votación se produjo días después de que el Estado anunciara que contribuiría a una recapitalización de la compañía aérea Air France por 4 mil millones de euros, más del doble de su participación, para apuntalar sus finanzas después de más de un año de restricciones de viaje por COVID-19.

La ministra de Industria, Agnes Pannier-Runacher, desestimó las críticas de la industria de la aviación de que en plena recuperación pandémica no era el momento de prohibir algunos vuelos nacionales y añadió que no había contradicción entre el rescate y el proyecto de ley climática.

“Sabemos que la aviación es un contribuyente de dióxido de carbono y que debido al cambio climático debemos reducir las emisiones”, indicó a la cadena de radio Europe 1. “Del mismo modo, debemos apoyar a nuestras empresas y no dejarlas en el camino”.

Es posible que el tráfico aéreo no vuelva a los niveles previos a la crisis de coronavirus antes de 2024, pronostican los analistas de McKinsey.

Un proyecto de ley diluido

Algunos activistas ambientales han dicho que el proyecto de ley no llega lo suficientemente lejos. Un foro climático de ciudadanos establecido por Macron para ayudar a dar forma a la política climática había pedido la eliminación de vuelos en rutas donde el viaje en tren dura menos de 4 horas.

La votación del sábado por la noche en la Asamblea Nacional fue la primera. El proyecto de ley llega al Senado antes de una tercera y última votación en la Cámara Baja, donde tienen mayoría el partido gobernante y los aliados de Macron.

Si en España se aprobara una ley similar, ya no se podría volar entre Valladolid y Madrid. Sin embargo, los vuelos entre la capital y Barcelona peligrarían, pues el trayecto en AVE entre Barcelona y Madrid puede hacerse justo en dos horas y media.