Guerra

Hamás cometió crímenes de guerra en el último conflicto con Israel

Los ataques con misiles desde Gaza violaron las reglas de combate

Para elaborar el reporte, se elaboraron entrevistas con testigos, visitas a los lugares, inspección de restos de los proyectiles y material de video
Para elaborar el reporte, se elaboraron entrevistas con testigos, visitas a los lugares, inspección de restos de los proyectiles y material de videoAdel HanaAP

“Los ataques con misiles y morteros de los grupos armados palestinos durante la guerra en Mayo de 2021, que mataron e hirieron a civiles en Israel y en la Franja de Gaza, violaron las reglas de combate y suponen un crimen de guerra”. Human Rights Watch (HRW) abrió con esta contundente afirmación un nuevo informe sobre la reciente escalada bélica entre el ejército israelí y Hamás en la franja costera, que dejó 256 palestinos y 13 israelíes muertos durante los once días que duraron los combates.

Según apunta la organización humanitaria, “Hamás y otros grupos armados dispararon misiles hacia zonas pobladas en Israel, que costaron la vida de 12 civiles –incluido un niño de 5 años y una adolescente de 16-, así como cientos de heridos. Además, proyectiles que no alcanzaron territorio israelí causaron un número indeterminado de muertos dentro de la franja”. HRW investigó varios casos de lanzamientos fallidos, como uno ocurrido en Jabaliya, al norte de la franja, que mató al menos siete personas e hirió a otras quince el 10 de mayo.

Para elaborar el reporte, se elaboraron entrevistas con testigos, visitas a los lugares, inspección de restos de los proyectiles y material de video. En el caso de Jabaliya, “el misil, lanzado sobre las seis de la tarde, cayó junto a la mezquita Omari. Tres adultos y un niño que estaban en la calle afirmaron que un cohete sobrevoló sus cabezas antes de caer en la calle. Otro adulto escuchó el sonido del lanzamiento y vio como impactó frente a su tienda”, apunta el informe.

Este y otros cinco artefactos fueron disparados desde una zona comercial y residencial a un kilómetro del impacto. Todos estallaron en la misma área del norte de Gaza. Tras investigar restos de metralla, se estipuló que los daños fueron causados por misiles no guiados del tipo “Grad”. “El tamaño de la explosión y los daños en las paredes cercanas es atribuible a la detonación de esta munición”, concluyeron.

Para Eric Goldstein, director ejecutivo de la oenegé en Oriente Medio y el norte de África, “las autoridades de Hamás y el gobierno de Israel evitaron hacer justicia de los crímenes de guerra cometidos, lo que demuestra la labor esencial que debe ejercer el Tribunal Penal Internacional (TPI)”. En un informe previo, HRW acusó también al estado judío de haber cometido crímenes de guerra, por atacar lugar “sin evidentes objetivos militares en sus aledaños”. Al fin del conflicto, Israel reportó que se lanzaron un total de 4.360 misiles “aleatoriamente” hacia zonas pobladas, incluido Tel Aviv y el centro del país, el área con más densidad de población en el estado judío. Acorde a las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI), 680 no lograron sobrepasar la frontera y estallaron en suelo gazatí.

El reporte de HRW llegó tan solo un día después de las protestas de UNRWA (la agencia para refugiados palestinos de la ONU), que condenó la “existencia y potencial uso por parte de grupos armados palestinos de túneles ubicados bajo nuestras escuelas en Gaza, poniendo al personal y los alumnos en riesgo”.

Según reveló el canal público israelí Kan11, Hamás evitó que un equipo de expertos de la ONU trabajara en los aledaños de un túnel descubierto hace dos meses bajo una escuela del organismo en el barrio de Zeitun, en la ciudad de Gaza. Los expertos pretendían asegurar que no hubiera restos de artefactos explosivos que no estallaron antes del inicio del curso escolar. Pero poco después de llegar, la policía de Hamás cercó el lugar y les obligó a salir, por lo que tampoco pudieron revisar el caso de otro túnel descubierto bajo una escuela en Rafah.