Ciudadanos afganos denuncian en las redes sociales las ejecuciones públicas de los talibanes

Ciudadanos afganos utilizan las redes sociales, en especial twitter, para denunciar los crímenes que cometen los talibanes desde que el Emirato Islámico tomó el poder en Afganistán el 15 de agosto de 2021.

El nuevo régimen, como hiciera hace 20 años, ha decretado la cerrazón informativa y tienen que ser los ciudadanos los que, a riesgo de ser descubiertos y castigados, informen al mundo de lo que está ocurriendo, del régimen de opresión que han impuesto los yihadistas, a los que, por cierto, Al Qaeda, ha prestado juramento.

El digital Memri publica una serie de fotografías y vídeos obtenidos fundamentalmente de twitter en las que, como se ve en la imagen que ilustra la información, un hombre es ejecutado en Herat por el sistema de la utilización de una grua.

Otros vídeos muestran el entierro  de una persona asesinada por los talibanes en la provincia de Kunar. Fue retenido en una cárcel durante tres días sin ninguna acusación y, finalmente, se le mató.

En otra grabación, se observa cómo un  talibán mata a tiros a un anciano, y luego acribilla su cuerpo en el distrito de Daikundi, en el centro de Afganistán.  El hombre era un hazara, una comunidad étnica chiíta considerada incrédula por los talibanes.

En Kabul, los talibanes detuvieron a un hombre, le pusieron un cartel y lo golpearon mientras la multitud observaba.

El 27 de septiembre, los talibanes secuestraron al ex soldado afgano Abdul Zahir Barakzai. Después de una noche de tortura, los yihadistas lo mataron a tiros.

En otra imagen se muestra a un niño asesinado por los yihadistas talibanes en la provincia de Takhar mientras su hermano y su hermana lloran impotentes. Uno de los terroristas dice: “este es el régimen del Emirato Islámico”. ] El niño fue asesinado porque su padre se había unido a la resistencia contra los talibanes en Afganistán.

En otra grabación se ve a los yihadistas talibanes mostrando los cuerpos de “sospechosos de secuestro” en varias camionetas por la ciudad de Herat para su exhibición pública.  En otra, los talibanes apedrean a un hombre hasta que muere.

Wazir Khan, un exjefe de policía, fue secuestrado por los talibanes y asesinado a tiros mientras tenía las manos atadas.

Dos adolescentes fueron arrestados, atados y torturados por los talibanes. Los adolescentes dijeron: “Mi familia no comió durante los últimos tres días, lamento haber tomado ese pan sin permiso, pero tuve que hacerlo”.

Y así, un largo etcétera.