Asia

Taiwán exhibe su corbeta “asesina de portaaviones” en unas maniobras para detener una invasión china

Taipei despliega cazas F-16 y hasta una veintena de fragatas y destructores en los ejercicios Han Kuang

Una fragata de misiles guiados de la Armada de Taiwán, clase Cheng Kung, disparando un misil durante un simulacro como parte del ejercicio militar Han Kuang en Yilan
Una fragata de misiles guiados de la Armada de Taiwán, clase Cheng Kung, disparando un misil durante un simulacro como parte del ejercicio militar Han Kuang en YilanTAIWAN MILITARY NEWS AGENCY / HAAgencia EFE

La Fuerza Armada de Taiwán se halla inmersa en unas ambiciosas maniobras militares para hacer frente a un posible desembarco anfibio en la isla por parte de las tropas de Pekín. China, que pretende integrar al territorio taiwanés como propio en los próximos años, envió este lunes aviones de combate del Ejército Popular de Liberación de China (EPL) a ambos lados de Taiwán, una isla de 29 millones de habitantes gobernada de forma democrática.

Los ejercicios militares Han Kuang, que comenzaron esta semana, se han extendido a toda la isla y cuentan con la participación de veinte buques de guerra entre fragatas y destructores, que lanzaron proyectiles para interceptar y atacar a una posible fuerza invasora frente a la costa noreste de Taiwán. En las maniobras se están utilizando aviones de combate F-16 y cazas Ching-kuo de fabricación nacional. También se usaron aviones de transporte C-130 para llevar al personal militar responsable del mantenimiento de los aviones de combate, junto con equipos y suministros, al este de Taiwán.

Helicópteros de ataque OH-58D de Taiwán aterrizan en el interior de la pista de atletismo de una escuela durante un simulacro de aterrizaje como parte del ejercicio militar Han Kuang en Hsinchu, Taiwán
Helicópteros de ataque OH-58D de Taiwán aterrizan en el interior de la pista de atletismo de una escuela durante un simulacro de aterrizaje como parte del ejercicio militar Han Kuang en Hsinchu, TaiwánRITCHIE B. TONGOAgencia EFE

Entre los barcos de guerra exhibidos está el buque de la marina de Taiwán, la corbeta Ta Jiang, apodada el “asesino de portaaviones”, que forma parte de un encargo de seis buques de este tipo comisionados por la Marina taiwanesa, equipados con misiles antiaéreos subsónicos y supersónicos, así como una variedad de armamento que incluye tubos de torpedos y misiles Hsiung Feng III capaces de alcanzar objetivos a distancias de hasta a 250 millas.

Las acciones que las Fuerzas Armadas taiwanesas están llevando a cabo incluyen la expulsión de tropas invasoras en un puerto cercano a la capital, el combate urbano de los reservistas y un ejercicio para transferir aviones a través a búnkeres excavados en la ladera de las montañas para evitar una primera ola de ataques con misiles.

Un grupo de personas se refugia en un sótano durante el simulacro de defensa aérea Wanan en Taipéi, Taiwán
Un grupo de personas se refugia en un sótano durante el simulacro de defensa aérea Wanan en Taipéi, TaiwánRITCHIE B. TONGOAgencia EFE

La presidenta de Taiwán, Tsai Ing-wen, se subió a bordo de un destructor de misiles clase Kidd de EEUU fuera de servicio frente a la ciudad portuaria de Suao para saludar a los soldados. “Este gran simulacro ha demostrado la capacidad y determinación de los soldados de la República de China para defender el país”, dijo Tsai, quien añadió que Taiwán está en la primera línea geopolítica para “luchar contra la agresión de los autoritarismos”.

En 2020, la presidenta Tsai lanzó el primer programa de submarinos autóctonos de Taiwán, que promete entregar la primera de las ocho naves submarinas diésel-eléctricas para 2025. Los nuevos submarinos “Made in Taiwan” llevarán sistemas de armas fabricados en Estados Unidos de Lockheed Martin y Raytheon.

En China estas maniobras militares no son vistas con agrado. El portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores del gigante asiático, Zhao Lijian, repitió las advertencias sobre cualquier movimiento militar de Taiwán. “El intento de Taiwán de confrontar militarmente a China es similar a una mantis que intenta obstruir un carro”, afirmó. “Al final, está condenado al fracaso”. Expertos citados por el diario pro chino Global Times aseguran que las maniobras de Taiwán no son más que un espectáculo que no cambia el equilibrio militar a través del Estrecho, sino que solo aumentan las tensiones.

Aunque las fuerzas armadas de Taiwán están bien entrenadas y bien equipadas con armas de fabricación estadounidense, China tiene una enorme superioridad numérica y está incorporando equipos avanzados, incluidos cazas de combate J-20.Pekín no perdió la oportunidad este lunes de mostrar su músculo militar y envió un dron de reconocimiento armado TB-001 del EPL al estrecho de Miyako y un avión de reconocimiento Y-8 junto a un caza J-11 que ingresaron a la zona de identificación de defensa aérea suroeste de Taiwán.

Las maniobras coinciden con el anuncio de que la presidenta de la Cámara de Representantes de Estados Unidos, Nancy Pelosi, pretende viajar a Taiwán, un viaje muy criticado por Pekín, que ha amenazado con duras represalias si Pelosi finalmente viaja a Taiwán. Estados Unidos no tiene relaciones diplomáticas oficiales con Taiwán, pero está obligado por una ley estadounidense a proporcionar a la isla los medios para defenderse.

El general Mark Milley, jefe del Estado Mayor Conjunto de EEUU,dijo este fin de semana durante un viaja a Indonesia que el ejército chino se ha vuelto más agresivo y peligroso en los últimos cinco años, y puso como ejemplo las constantes interceptaciones de aviones y barcos chinos en la región del Pacífico.