Países Bajos

Rutte asume las riendas de su cuarto Gobierno con ambiciosos objetivos climáticos

El nuevo Ejecutivo holandés, paritario y formado por los mismo cuatro partidos de centro derecha, promete cero emisiones en 2050

Los 20 miembros del nuevo Gobierno holandés mantienen 1,5 metros de distancia en su foto de familia en el Palacio Real de La Haya
Los 20 miembros del nuevo Gobierno holandés mantienen 1,5 metros de distancia en su foto de familia en el Palacio Real de La HayaPOOLREUTERS

El nuevo Ejecutivo neerlandés juró este lunes sus cargos, 10 meses después de las elecciones generales, con promesas de grandes inversiones en la lucha contra el cambio climático.

Bautizado como Rutte IV, por ser el cuarto Gobierno de coalición consecutivo del primer ministro, Mark Rutte, está compuesto por diez ministros y diez ministras. Entre ellas, la primera mujer en asumir la cartera de Finanzas, Sigrid Kaag, quien juró el cargo por videoconferencia, al estar contagiada de coronavirus. Su antecesor, el democristiano Wopke Hoekstra, que puso en pie de guerra a los países del sur de Europa en 2020 al condicionar las ayudas para superar la pandemia, se hará cargo de la diplomacia holandesa.

Al frente del Gobierno holandés de forma ininterrumpida desde 2010, Rutte es el primer ministro más veterano de la UE tras el húngaroViktor Oban, que también asumió el poder ese año. Tras volver a ganar las elecciones en marzo pasado, el líder liberal (VVD) ha necesitado diez meses para convencer de nuevo a los otros tres partidos con los que gobernaba desde 2017: liberales de izquierdas (D66), democristianos (CDA) y Unión Cristiana (CU), de inspiración protestante.

Entre los objetivos del nuevo Ejecutivo está construir dos centrales nucleares. También prevé dedicar 35.000 millones de euros en diez años para combatir el calentamiento global. Una amenaza importante para Países Bajos, donde un tercio de su territorio está bajo el nivel del mar. Por primera vez, el Gobierno neerlandés tiene un ministro de Clima y Energía. Uno de sus ambiciosos objetivos es lograr un país energéticamente neutral para 2050.

El acuerdo de coalición también prevé dedicar 25.000 millones de euros en la lucha contra las emisiones de nitrógeno (ganadería y construcción); unos 3.000 millones adicionales para Defensa; y casi 1.000 millones para subir salarios a los docentes. Este sustancial aumento del gasto público supondrá que Países Bajos, uno de los “países frugales” que aboga en la UE por la austeridad presupuestaria, incumpla en 2025 el objetivo de tener una deuda pública por debajo del 60%.

Otra de las novedades será que el cuidado de la infancia será prácticamente gratuito en Países Bajos en vez de regirse como hasta ahora por subvenciones. El enorme escándalo de las acusaciones falsas de fraude de la Agencia Tributaria contra 48.000 personas, que obligó a dimitir al Gobierno hace un año, permanece aún muy vivo entre una ciudadanía que ha perdido la confianza en sus instituciones.

Sin embargo, a corto plazo una de las primeras tareas del Ejecutivo liderado por Rutte es decidir si prorroga el confinamiento vigente hasta este viernes, una situación que ha generado enorme malestar entre la opinión pública. Hace un año, la introducción del toque de queda para combatir la pandemia derivó en los peores disturbios vividos en el país desde los años sesenta. Las restricciones anticovid y el escándalo de las ayudas familiares han generado una fuerte desafección ciudadana hacia su clase política que el nuevo Gobierno está obligado a revertir.