Política

El Futuro de Venezuela

“Luis Carlos no ha cometido delito alguno. Los cargos son una falacia”

Denuncia que el reportero fue golpeado y que ella fue amenazada

Luis Carlos Díaz, el periodista hispano-venezolano detenido más de 24 horas
Luis Carlos Díaz, el periodista hispano-venezolano detenido más de 24 horaslarazon

Denuncia que el reportero fue golpeado y que ella fue amenazada.

La esposa de Luis Carlos Díaz convocó ayer una protesta ante la Fiscalía para denunciar la detención del periodista. Naky Soto, también reportera y activista, atendió a los medios que acudieron a la movilización, entre los que se encontraba LA RAZÓN. Rechazó las acusaciones infundadas del régimen chavista contra Díaz. «El programa se emitió el 17 de febrero, pero lo grabamos el 15. Desde la cuenta de 'Con el Mazo Dando' (el programa de Diosdado Cabello) tomaron un trozo para vincularlo con el apagón nacional», indicó la periodista. «Son muchos ingenieros, vinculados a Corpoelec, que han explicado que es inviable la tesis del 'hackeo' al SCADA, pues es un sistema analógico que no está conectado a una red». Asimismo, su esposa narró que Díaz salió de la radio y volvía a casa cuando fue arrestado. «Sin embargo, el acta dice que lo detuvieron en 'flagrancia'. ¿Alguna vez han visto a un 'hacker' en bicicleta y escribiendo código al mismo tiempo? Cuando lo detuvieron no había orden de detención. Estuvo desaparecido desde las 17:45 hasta las 2:15 de la madrugada, cuando apareció una comisión del Servicio Bolivariano de Inteligencia (Sebin)» en su casa: «Para ese procedimiento sí había acta y una buena cantidad de funcionarios cuyo objetivo era fundamentalmente llevarse todos los equipos electrónicos que teníamos, a ver si en alguno de ellos había información sobre lo que le acusan. Se llevaron computadoras buenas, dañadas, teléfonos viejos...».

Al preguntarle si había podido hablar con su marido, Soto reconoció que Díaz «estaba con ellos durante el allanamiento. Tuve la posibilidad de conversar con él. Estaba bastante aplomado. La primera comisión del Sebin que lo arresta lo maltrató. Lo golpearon con el casco de la bicicleta, le dijeron que yo estaba detenida en el Hospital Militar, e incluso le prometieron que llevarían un cadáver hasta nuestra casa para acusarnos de asesinato». En cambio, «la comisión del allanamiento nos dijo cosas insólitas como que nos conocían en redes y les encantaba nuestro trabajo. La esposa de uno de ellos le pidió un autógrafo y una foto con él». Confiesa que no vio bien la orden de allanamiento: «La hoja con la orden era grisácea, con letras mal escritas. Ante la posibilidad de hablar con él o leer el acta, preferí lo primero».

Sobre las agresiones que sufrió el periodista hispano-venezolano, Soto se emocionó al confesar que «le dieron cascazos en la cabeza, no tenía golpes en la cara, ni un rasguño. Lo amenazaron conmigo por mi condición de paciente oncológica. Cuando se marcha la comisión, uno de los que estaba allí me hace saber que mejor no hiciera mucho ruido porque yo también soy sujeto de aprehensión porque hago el vídeo con Luis Carlos». Soto añadió que en días anteriores no habían recibido más amenazas que las habituales por «Con el Mazo Dando», «que es más que suficiente en este país». E insiste en reclamar «la libertad plena de Luis Carlos porque no ha cometido delito alguno y los cargos son una falacia impresionante. Queremos pedir a la comisión de la Alta Comisionada de Derechos Humanos de la ONU [Michelle Bachelet] que nos ayude a verificar cómo está psicológica y físicamente. Si esto ocurre a alguien con semejante nivel de exposición pública, eso es un mensaje en sí mismo. Cualquier otro ciudadano es aún más vulnerable».

En cuanto a si teme ser detenida, es contundente: «La prisión no puede ser más severa que la condición neurológica con la que he vivido 11 años y el cáncer de mama con el que he vivido hasta ahora. Una quimioterapia en Venezuela es una sanción aún mayor que la propia sentencia del cáncer. Temerle a la prisión, sin menospreciar lo que pasa en las cárceles, no puede ser más que la importancia de que Luis Carlos tenga voz». Por último, admite que no sabe dónde está su esposo: «No lo precisaron. Debe de estar en la sede de Plaza Venezuela o en El Helicoide».