Al menos seis muertos y una veintena de heridos en Ucrania tras el mayor ataque aéreo ruso del año

Ucrania acusó el miércoles a Rusia de haber bombardeado más un centenar objetivos «en las últimas 24 horas», más que en ningún otro día en lo que va de año. «El enemigo ha bombardeado 118 localidades en 10 regiones. Es el mayor número de ciudades y pueblos atacados desde principios de año», denunció en redes sociales el ministro del Interior ucraniano, Ihor Klymenko.

Al menos seis personas han muerto y una veintena han resultado heridas como consecuencia de los ataques. En Nikopol, una localidad ubicada en la provincia de Dnipropetrovsk, una persona ha muerto y otras cuatro han resultado heridas como consecuencia del ataque de varios drones, tal y como ha relatado el gobernador regional, Serhi Lisak: «Esta noche el enemigo lanzó 25 obuses de artillería hacia la región de Nikopol. Impactaron en el centro del distrito y en la comunidad de Marganets. En total bombardearon zonas pobladas cinco veces».

En el centro de la ciudad de Jersón, las fuerzas rusas han llevado a cabo ataques durante toda la noche, según ha denunciado su alcalde, Roman Mrochko, quien ha pedido a la población que abandone sus casas para ir a los refugios. En la mañana del miércoles, el centro de la ciudad ha sido objeto de otro bombardeo que ha provocado la muerte de un trabajador del Ayuntamiento, así como otros dos heridos, uno de ellos de gravedad.

«Los rusos siguen aterrorizando las ciudades y pueblos de Ucrania. Los ocupantes aumentan el número y la intensidad de los ataques; esta noche transcurrió con inquietud en varias zonas. Se han visto afectadas instalaciones e infraestructuras críticas», asegura el servicio de información de la ciudad.

En Zmivka, una pequeña localidad de Berislav, en Jersón, los bombardeos de esta mañana han dejado otro muerto y varios heridos más, según ha contado la Fiscalía Regional. En Járkov, la localidad de Kupiansk ha sido atacada durante toda la noche, dejando un muerto en la pequeña localidad Petropavlivka, mientras que en Donetsk, en la aldea de Pivzhne, ha muerto otra persona.

Un total de once provincias han sido alcanzadas por los misiles rusos, entre ellas la de Poltava, donde una refinería de petróleo en Kremenchuk ha sido alcanzada, produciéndose un incendio que ya ha sido extinguido. Chernígov, Zaporiyia –donde ha muerto otra persona–, Sumy o Kirivogrado, donde su red ferroviaria se ha visto dañada por los ataques, han sido otras de las provincias bajo el punto de mira de las tropas rusas.

Ucrania y sus aliados occidentales temen que Rusia intensifique sus ataques contra las infraestructuras energéticas ucranianas de cara al frío invierno, como ya hiciera Moscú el pasado año.