Naciones Unidas

Zelenski, ante la ONU: «Pregunten a Prigozhin si se puede confiar en las promesas de Putin»

El presidente de Ucrania alerta sobre la posibilidad de una guerra nuclear y adelanta la presentación de un acuerdo de paz maximalista

New York (United States), 19/09/2023.- President of Ukraine Volodymyr Zelensky addresses the 78th session of the United Nations General Assembly at the United Nations Headquarters in New York, New York, USA, 19 September 2023. (Ucrania, Nueva York) EFE/EPA/JUSTIN LANE
El presidente de Ucrania, Volodimir Zelenski, interviene en la Asamblea General de la ONUJUSTIN LANEAgencia EFE

«La unidad puede evitar las guerras». Así comenzó la esperada alocución de Volodimir Zelenski ante la Asamblea General de la ONU en Nueva York. Era el plato fuerte de la jornada. El presidente de Ucrania ocupó la tribuna dos años después de su última aparición presencial en el foro mundial. Denunció entonces la intervención rusa en el Donbás y la ocupación de la península de Crimea. Esta vez, Zelenski ha avanzado que presentará el miércoles ante el Consejo de Seguridad de la ONU un plan de paz maximalista que no solo servirá para poner fin a la invasión rusa de Ucrania, sino a todas las guerras. «No todo gira en torno a Ucrania», avanzó.

Es una fórmula que la diplomacia ucraniana ya esbozó el pasado año ante la Asamblea General de la ONU y en la Cumbre del G20 en Indonesia. También el propio Zelenski en Hiroshima y Riad. «Por primera vez tenemos la ocasión de acabar con una guerra con las condiciones de la nación agredida», añadió el presidente de Ucrania. En este sentido, dijo Zelenski que Kyiv prepara una una cumbre de paz global a la que ha invitado «a todos los que no estén dispuestos a tolerar la agresión de Rusia».

El líder ucraniano dijo ser «consciente de los intentos de llegar a acuerdos [de paz] turbios entre bastidores». No dio nombres ni profundizó en sus sospechas, pero insistió en que «no se puede confiar en el mal». «Pregunten a [Yevgueni] Prigozhin si se puede confiar en las promesas de Putin», lanzó con sorna en alusión al difunto líder de Wagner, que murió en agosto un accidente de avión en suelo ruso tan solo dos meses después de rebelarse contra el Kremlin.

Había hablado Zelenski de los riesgos de una guerra nuclear, una guerra que «hará que no nos volvamos a reunir», como resultado de las acciones que, por ejemplo, está llevando a cabo Rusia en la central nuclear de Zaporiyia o de los ataques que podrían llegar a producirse en otros conflictos y en otras latitudes. «Cualquier guerra puede ser la última», subrayó el presidente de Ucrania, que recordó cómo el siglo XX había enseñado al mundo que el uso de armas nucleares debería de contenerse. «Es una buena estrategia, pero no puede ser la única para proteger al mundo de la guerra final. Ucrania se deshizo de su arsenal nuclear y precisamente fue Rusia quien lo mantuvo en los años 90», denunció.

Condenó Zelenski el bloqueo de los puertos ucranianos en el mar Negro y los recientes ataques a orillas del Danubio, que podrían haber alcanzado incluso el territorio de la vecina Rumanía, miembro de la OTAN. «Rusia utiliza como arma la escasez alimentaria y la energía», insistió el presidente ucraniano, que llamó la atención a algunos socios europeos. «Los países europeos que no aceptan el grano ucraniano están ayudando a Rusia», dijo en alusión a Polonia, Hungría y Eslovaquia.

Recordó Zelenski la orden de detención de la Corte Penal Internacional (CPI) que pesa sobre el presidente de Rusia, Vladimir Putin, y su comisaria para los Derechos de la Infancia, Maria Lvova-Belova, por el «rapto de niños en los territorios ocupados de Ucrania que después son deportados». «Niños que están siendo adoctrinados para odiar a Ucrania y romper los lazos con sus familias», remarcó.

«Rusia inicia una guerra cada década». Es la conclusión de Zelenski, que mencionó durante su alocución la ocupación rusa de partes de Moldavia y Georgia, así como la conversión de Siria en un «paisaje de ruinas»: «Si no fuera por Rusia, allí nunca se habrían utilizado armas químicas». «Rusia casi ha absorbido a Bielorrusia, amenaza a Kazajstán y a los países bálticos», añadió en esta línea para presentar a Rusia como un Estado beligerante e imperialista. «El agresor deja polvo, cenizas y ruinas; aun sin armas nucleares».