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La excelencia en la Alta Joyería de Van Cleef & Arpels viene de muy lejos

La firma de lujo francesa Van Cleef & Arpels es mundialmente conocida gracias a su largo recorrido en el sector de la joyería, siendo de las principales distribuidoras del siglo XX y XXI

Van Cleef & Arpels
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Hacer piezas dignas de la denominación ‘Alta Joyería’ no es tarea sencilla. Es un arduo proceso que, por norma general, conlleva años de prueba y error, así como una gran historia detrás de la marca.

Los orígenes de Van Cleef & Arpels se remontan al año 1895, cuando Alfred Van Cleef se casó con Estelle Arpels, la hija de un comerciante de piedras preciosas. La energía del amor y la pasión por las piedras preciosas que tenían en común, llevaron a Alfred y a sus cuñados a fundar un negocio familiar.

Van Cleef & Arpels
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Esta aventura comenzaría en 1906 con la apertura de una pequeña boutique, que poco después trasladarían a la exclusiva Plaça Vendôme de París. Actualmente la tienda sigue estando allí y sus productos se venden en 214 puntos de venta más.

Así, cuatro jóvenes ambiciosos, y Estelle como encargada de las cuentas, lograrían consagrar en 1912 Van Cleef & Arpels como una de las firmas de joyas más exquisitas del mundo y, por ende, con la clientela de más alto nivel de la época a nivel internacional. La repartición de tareas entre todos los miembros del equipo era perfecta.

Van Cleef & Arpels
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Esto, junto al traslado forzoso de la familia a Nueva York, hizo que años más tarde expandieran su mercado. La familia, de origen judío, se vio obligada a trasladarse a Estados Unidos a causa de la entrada de tropas alemanas en París. Lejos de suponer una derrota, este acontecimiento les facilitó tener un futuro prometedor allá por 1933.

Por un lado, Carlos Arpels ejercía de vendedor estrella, Julien Arpels, seleccionaba las piedras más exquisitas del mercado, Alfred Van Cleef administraba, planificaba la producción y realizaba las tallas perfectas y Louis Arpels, mantenía las relaciones profesionales con los clientes más selectos.

Ya a partir de la década de los años 20 los componentes de Van Cleef & Arpels, habían tomado la decisión de ir un paso más allá y experimentar con elementos distintos de los que se empleaban en joyería tradicional. Entonces iniciaron la producción, además de joyas icónicas llenas de significado e incluso fragancias, otras obras de arte como relojes, espejos y lámparas repletos de gemas que conquistaron el mundo.

Durante más de 100 años, las calidades en los materiales empleados, el saber hacer, los diseños de vanguardia y la innovación técnica, han permanecido en el trabajo heredado de la reconocida Van Cleef & Arpels.

Las piezas únicas de las colecciones principales están confeccionadas con diamantes, rubíes, esmeraldas o zafiros. Y las joyas más famosas de la casa son las convertibles como el sautouir, que es un collar largo que, gracias a una depurada técnica de elaboración se transforma fácilmente en colgante, grandes pulseras, pendientes o en un gran broche, así como sus pulseras con engaste invisible de piedras preciosas.

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