"Como borricos"

Agricultores estallan contra el Gobierno: "Han querido guerra, pues vamos a entrar a Madrid por cojones. A ver quién tiene más huevos"

Isabel Díaz Ayuso expresaba su apoyo al sector agrario acusando al Gobierno central de ser responsable de su ruina debido a su política ideológica

Este martes, el Ayuntamiento de Madrid ha brindado un mensaje de tranquilidad en lo que al tráfico se refiere, a pesar de las protestas de los agricultores que han generado problemas en algunas vías de entrada a la capital. La vicealcaldesa de Madrid, Inma Sanz, aseguraba que hasta el momento no se han registrado grandes afecciones en la ciudad debido a estas manifestaciones. Sí ha reconocido que ha habido intentos de llegar a Mercamadrid y de entrar a la capital a través de Vicálvaro, aunque afirmó que finalmente éstos se disolvieron sin inconvenientes. Por si la protesta llegara a la capital y se produjera alguna afectación en áreas como la M-40, el Ayuntamiento sostiene mantenerse en constante coordinación con las autoridades pertinentes.

Por otro lado, la presidenta madrileña, Isabel Díaz Ayuso, ha expresado su apoyo al sector agrario, acusando al Gobierno central de ser responsable de su ruina debido a su política ideológica. En su cuenta de la red social X, Díaz Ayuso destacó la importancia de escuchar y atender las demandas de los agricultores y ganaderos, subrayando que la Comunidad de Madrid está comprometida con ellos. Además, anunció que se han aprobado ayudas extraordinarias por un valor de 7,5 millones de euros para mitigar los efectos del aumento de costes y la sequía en el sector agrario.

Mientras tanto, las protestas de los agricultores continúan afectando a varias carreteras de España desde las primeras horas del día. En las zonas limítrofes con la Comunidad de Madrid, como Toledo, se han registrado dificultades en la A-5 y la A-42, con cortes totales o parciales debido a la presencia de tractores. Asimismo, en la A-3, a la altura de Villarejo de Salvanés, se ha reportado tráfico lento debido a un bloqueo breve por parte de estos grupos.

Precisamente en Villarejo de Salvanés, varios agricultores han expresado su indignación contra el Gobierno y las trabas impuestas por la Guardia Civil para evitar que la columna de tractores avanzase hacia Madrid. Uno de ellos, ataviado con chaleco amarillo, declaraba visiblemente enfadado: "Los del Gobierno han querido guerra, no nos dejan salir a la A-3, pues vamos por locales, y ahora vamos a entrar a Madrid por cojones. Vamos a ver quién tiene más huevos". Lo hacía después de asegurar haber "pactado con la Guardia Civil" una protesta ordenada y formal por la A-3, y finalmente no haber sido así.

Al ser preguntado sobre la magnitud de la concentración, ha asegurado que en ese momento habría presentes unos 50 tractores, sin contar los que estaban por llegar desde los pueblos de alrededor y que se unirían por el camino. "Parece ser que los del Gobierno se han cagaó, que han visto que está cortada Lérida, Sevilla, Zamora, León y han dicho, aquí, a la central donde está el Gobierno, no se puede pasar", ha continuado diciendo. "Pues si no quieren que vayamos de la manita, vamos a lo bestia, que 'borricos' tenemos para empujar".

Otro de los agricultores presentes en ese tramo de la protesta, ha criticado la gestión burocrática y las restricciones normativas impuestas desde Bruselas, afirmando que "nos están haciendo la vida imposible". Precisamente ese papeleo "asfixiante" constituye una de las demandas principales del sector agrario al Ejecutivo. "Allí se juntan 400 y deciden cuando tengo yo que sembrar, cuando ellos no tienen ni puta idea de cómo funciona el campo", puntualizaba el agricultor para luego sentenciar: "Más claro, agua".

La mujer de un trabajador del campo, también ha expresado su frustración por la situación, resaltando la "dura labor" de quienes "se levantan a las seis de la mañana" y "regresan por la noche hartos a cosechar, a sembrar". Enfatizando el papel crucial que desempeñan en la sociedad como productores de alimentos y destacando que son ellos los que proveen comida, aceite, cereal y otros productos españoles a las mesas de las familias, advertía: "No podemos más, nos están ahogando, nos están asfixiando".