Un gran salto adelante europeísta

El Parlamento Europeo cerró ayer el círculo de la unión bancaria con la ratificación del mecanismo único de liquidación, el refuerzo del sistema de garantía de depósitos y la directiva de resolución. Europa ha sido capaz de dar una respuesta a la crisis de la deuda de la eurozona en menos de dos años con un entramado legal que reforzará el control y la supervisión y evitará que las futuras quiebras se solventen con dinero público. Aunque es cierto que la UE podía haber sido más ambiciosa, también lo es que la unión bancaria es una apuesta europeísta de primer orden que refuerza el proyecto común.