Entrevista

«La forma de adaptar el modelo de residencias es conservar y atraer talento»

José María Pena CEO de DomusVi

Jose Maria Pena en el centro residencial DomusVi Bonanova de Barcelona
Jose Maria Pena en el centro residencial DomusVi Bonanova de BarcelonaAdrian Quiroga / shootingShooting

Uno de los problemas más acuciantes en la asistencia socio -sanitaria en España es la falta de personal de enfermería. ¿Cómo podría atajarse?

Según cálculos de la Asociación de Empresas de Servicio para la Dependencia, España necesitará en los próximos cinco años 40.000 profesionales de la enfermería más de los que tiene ahora. En cambio, el crecimiento orgánico de éstos no está a la altura de las demandas de la profesión: desde 2020 los profesionales colegiados tan solo han aumentado un 1,8% (5.727 personas), según datos del INE. DomusVi es una firme defensora de la figura del profesional de enfermería como indispensable en los centros residenciales. Pero, ante su carencia crónica, y más allá de puntuales planes de contingencia, se impone un diálogo entre todos los actores del sector que redunde en una gran inversión para formar a nuevos profesionales capaces de dar respuesta a numerosas necesidades, dentro de un ámbito cuya demanda va a seguir creciendo. Todos debemos hacer cuanto esté en nuestras manos para que los jóvenes lo conozcan, detecten las oportunidades que les podemos ofrecer, y nos vean como una apuesta sólida y de futuro.

¿Cómo solventan el reto demográfico y la necesidad de personal para cubrir la creciente demanda de profesionales?

Permítame que comparta con ustedes algunas cifras, que nos ayuden a entender la magnitud del fenómeno: según proyecciones del INE, en 2033 habrá cerca de 12,3 millones de mayores en España, lo que constituirá más del 25% de la población total. Para 2050, se prevé que el nuestro sea el cuarto país más envejecido de la UE con 16 millones de personas de más de 64 años, un tercio de la población. La única manera de afrontar este contexto y adaptar el modelo de residencias a las crecientes necesidades es atrayendo y conservando talento. Como primer empleador del sector, con una plantilla de 28.000 personas, somos muy conscientes de la necesidad de invertir mucho en ello en las diversas áreas del cuidado a las personas. Yendo a aspectos de mayor concreción: además de acuerdos con universidades, escuelas de negocio o colegios de formación profesional, invertimos mucho en mantener el talento a través de la formación interna. Permítame destacar que, entre otros proyectos, la nuestra es la compañía del sector pionera en la creación de una Universidad Corporativa, fruto de la colaboración entre la Universidad de Barcelona y nuestra fundación. Y es que también necesitamos muchos otros perfiles con especialización en los campos de salud mental, diversidad funcional y neurociencias, así como aquellos especializados en la supervisión de la atención socio-sanitaria y socio-asistencial para la promoción de la autonomía personal. En paralelo, y como el resto de los sectores económicos, para el nuestro la digitalización es un elemento muy importante. En este sentido, se demandan, cada vez más, profesionales capaces de hacer avanzar el cuidado de las personas mayores hacia la Industria 4.0.

Hablando de digitalización, ¿cómo ve la implantación de la tecnología en el futuro?

Nuestro departamento de I+D+i trabaja para mejorar la calidad de los servicios y las terapias a través de la implantación de las últimas metodologías y tecnologías con el objetivo de facilitar el trabajo de nuestros equipos, logrando así una mejor atención para nuestros residentes e usuarios. En este sentido, nuestro área de Clientes y Transformación Digital es un departamento específicamente creado para abordar las nuevas necesidades que van a tener todas las personas e impulsar soluciones tecnológicas, digitales e innovadoras que mejoren nuestros servicios y optimicen los procesos, los recursos y nuestro equipo. En este sentido, somos la compañía con mayor número de espacios sensorizados actualmente en España. Ahora bien, no solo innovamos a nivel tecnológico. Por ejemplo, fomentamos las innovaciones terapéuticas en nuestros centros en dos ámbitos de actuación: aquellas que incorporan nuevas tecnologías revirtiendo directamente en los residentes, y aquellas que, sin el uso de la tecnología, son innovadoras por su uso en ámbitos que hasta ahora no estaban aplicadas. Algunos ejemplos son Nutri+, para avanzar en la nutrición de personas con necesidades especiales; el Proyector Obie, un sistema interactivo táctil para realizar terapias cognitivas; la foca Nuka, un robot para residentes con problemas cognitivos fruto de enfermedades neurodegenerativas o el proyector 360º que proporciona una estimulación física y cognitiva a través de la realidad inmersiva.

El Ministerio de Derechos Sociales ha impulsado un nuevo modelo de acreditación de residencias. ¿Cómo lo valora?

Apoyamos muy positivamente los puntos del plan referentes a la mejora de los espacios, a ampliar la posibilidad de elección, a la mejora de ratios y a ayudar a que las personas transcurran más tiempo en sus hogares. No hay límite cuando se trata de que el sector mejore. Apoyamos este nuevo acuerdo y estamos deseando trabajar en aspectos tan necesarios como una memoria económica que permita establecer indicadores claros o definir un plan de transición de un modelo a otro.

La partida para dependencia recientemente aprobada en los Presupuestos Generales del Estado ha subido...

Estamos contentos de que se incremente la partida de Dependencia, y confiamos en que ésta se vaya incrementando hasta igualar la demanda. Hay que pensar que se requiere de una mayor inversión, no solo para aumentar la cantidad de plazas sino también para mejorar los espacios y servicios.

¿Cómo cree que el sector privado y el público pueden colaborar?

Más que de «poder colaborar» deberíamos estar hablando de «deber colaborar». Nos necesitamos mutuamente y no podemos dejar de dialogar de manera profunda. El futuro necesita de la inversión tanto pública como privada para garantizar una oferta variada que contemple soluciones públicas y privadas para todos. Otro importante frente es el de avanzar hacia un modelo con mejor integración entre el aspecto sanitario y el social, sin olvidar que en las residencias cuidamos y no curamos.