Entrevista

«El paciente sale caminando el mismo día de la cirugía de prótesis de rodilla»

Para ser candidato, hay que vivir a menos de una hora del hospital y contar con el apoyo de un adulto, explica a la sección "10 preguntas" el doctor Manuel Leyes, jefe de Servicio de Traumatología y Cirugía Ortopédica del centro médico-quirúrgico Olympia Quirónsalud, en Madrid

El doctor Manuel Leyes, jefe de Servicio de Traumatología y Cirugía Ortopédica de Olympia Quirónsalud, en Madrid
El doctor Manuel Leyes, jefe de Servicio de Traumatología y Cirugía Ortopédica de Olympia Quirónsalud, en Madridquirónsalud

1. Recientemente, han realizado con éxito la primera cirugía de prótesis total de rodilla ambulatoria que se hace en España. ¿Qué técnicas o qué tipo de anestesias han utilizado para conseguirlo?

Uno de los aspectos clave en esta cirugía protésica es la anestesia. Al paciente se le realiza antes de comenzar la intervención una anestesia regional raquídea; durante la operación, una anestesia local infiltrativa periarticular, y al finalizar la cirugía, un bloqueo del canal de los aductores.

2. Habitualmente la estancia en el hospital tras la operación de prótesis total de rodilla ¿cuánto tiempo suele ser?, ¿cinco días?

Actualmente la estancia media hospitalaria tras una prótesis total de rodilla es de tres días.

3. ¿El paciente sale ese mismo día caminando con muletas?

Efectivamente. El paciente sale caminando del hospital y sin dolor gracias a las técnicas de anestesia previamente mencionadas y a una analgesia adecuada. Antes de la cirugía, nuestros fisioterapeutas instruyen al paciente en la deambulación con muletas, y tan pronto se pasa el efecto de la anestesia epidural el paciente se levanta y camina.

4. ¿Sirve para todos los pacientes o las personas mayores no serían candidatas por el especial cuidado que requieren?

La selección de los pacientes apropiados para la cirugía protésica ambulatoria es muy importante. Utilizamos criterios quirúrgicos basados en la experiencia del cirujano; criterios médicos que se basan en la clasificación de la Sociedad Americana de Anestesiólogos (ASA, por sus siglas en inglés). Son candidatos los pacientes ASA I y II, con sus comorbilidades controladas y que no presenten descompensación.

Por último, utilizamos criterios socioculturales. Los pacientes ambulatorios requieren apoyo domiciliario por parte de un adulto responsable. Se recomienda también que los pacientes no vivan más allá de una hora de distancia del centro hospitalario. Es importante que los pacientes comprendan las instrucciones postoperatorias y estén dispuestos a seguir las recomendaciones médicas.

5. ¿Qué ventajas ofrece esta opción de cirugía protésica ambulatoria para el paciente?

Los beneficios de este tipo de cirugía son numerosos. En primer lugar, promueve la rehabilitación precoz, ya que el paciente experimenta antes una mejor movilidad y función en la rodilla reemplazada. También implica una menor morbilidad y aporta beneficios psicológicos, reduciendo el estrés de la persona operada, ya que disminuye el tiempo de separación de su entorno habitual y supone una menor interferencia con su vida cotidiana. Además, mantiene la calidad de la atención y la seguridad para el paciente y promueve el trabajo multidisciplinario, al intervenir el traumatólogo, el anestesista, el fisioterapeuta y personal auxiliar y de enfermería.

Este tipo de cirugías aporta múltiples beneficios al paciente y es de esperar que se realice cada vez con más frecuencia en nuestro país.

6. ¿Por qué implica una menor morbilidad?

Porque disminuye el riesgo de infecciones hospitalarias y el riesgo de trombosis venosa profunda, ya que a los pacientes se les estimula para que se muevan y caminen más pronto después de la cirugía.

7. ¿Y si se le va la anestesia en su casa?

El paciente comienza a tomar analgésicos y antiinflamatorios antes de que despierte la pierna para que cuando aparezca el dolor ya tenga niveles adecuados en su cuerpo. También se le entrega una máquina de criocompresión, que se le pone nada más terminar la cirugía y que, excepto para andar, debe llevar puesta en casa. Finalmente utilizamos una pauta de medicación específica para un control multimodal del dolor postoperatorio.

8. Durante la estancia hospitalaria, habitualmente el paciente aprendía una serie de cuidados para acelerar al máximo la recuperación, controlar la herida, etcétera. Ahora, con la ambulatoria, ¿va el médico a su casa, se le asiste por videoconferencia o va al hospital cada determinados días?

El paciente y el familiar que le va a acompañar en casa reciben una instrucción antes de la cirugía sobre cuidados de la herida, ejercicios que debe hacer y signos de alarma que debe tener en cuenta. Se le entrega un número de teléfono operativo las 24 horas, se le hace un seguimiento telemático y acude a revisión a los dos días de la cirugía.

9. ¿Cómo es el primer paciente que habéis operado de prótesis de rodilla de forma ambulatoria? ¿Y cuáles eran sus principales miedos?

El primer paciente que hemos operado tiene 57 años, buen estado de salud, muy inteligente, colaborador y con antecedente de cirugías previas de la rodilla. El paciente era plenamente conocedor de que era el primer paciente que se iba a hacer en España y que llevábamos 12 meses preparándonos con visitas a centros ambulatorios en Estados Unidos y Francia. Sus miedos principales eran el control del dolor y la seguridad de la cirugía.

10. Una pregunta que se hará el familiar del paciente es si desde el hospital se hará parte para que pueda cuidar al paciente el tiempo que necesite, porque al no estar en el hospital no creo que sea posible alargar los días de baja para cuidados, ¿o sí?

El hecho de que esté en su casa no implica que no precise ayuda. Al paciente se le entrega un informe médico en el que se incluye la necesidad de ayuda domiciliaria. De hecho, se instruye antes de la cirugía a la persona concreta que le va a cuidar.