Conflicto

La UE prohibirá las exportaciones de vacunas si los laboratorios desvían dosis

Se activará un mecanismo para evitar el incumplimiento de los contratos

Mientras continúa el diálogo con AstraZeneca para firmar la pipa de la paz, Bruselas no se queda de brazos cruzados y comienza a enseñar la uñas. El Ejecutivo comunitario está ultimando un mecanismo para controlar el envío de vacunas a terceros países ante la sospecha de que AstraZeneca está desviando las dosis ya comprometidas con la UE. Esta medida ha sido presentada como fuentes comunitarias como un mecanismo de “autorización y notificación” previa que pretende dotar de transparencia a los intercambios, en un momento en el que los laboratorios están siendo incapaces de cumplir sus compromisos de entrega. Hace una semana AstraZeneca sorprendió a las autoridades comunitarias al plantear un recorte del 75% de las dosis comprometidas.

Pero no sólo se trata de controlar las exportaciones sino también de prohibirlas, aunque sea como último recurso. Según explican las mismas fuentes, si las notificaciones de los movimientos de aduanas certifican que los laboratorios están incumpliendo los contratos firmados con los gobiernos europeos, las autoridades nacionales donde se ubiquen los centros de producción podrán prohibir estas exportaciones, después de un proceso de consulta con la Comisión Europea y el resto de los gobiernos europeos. Fuentes diplomáticas reconocen que los detalles de este proceso deben seguir siendo perfilados, pero se espera que este mecanismo pueda ser aprobado mañana.

Según los técnicos europeos, deberá ser un proceso “de horas, no de días” para que sea lo suficientemente eficaz y tan sólo quedarán exentas de la necesidad de notificación aquellas exportaciones por motivos humanitarios a países pobres. La prohibición de exportar tan sólo tendrá lugar en “circunstancias muy específicas”.

Respuesta de AstraZeneca

AstraZeneca ha negado en los últimos días que esté desviando vacunas a otros países, con el objetivo de vender sus vacunas al mejor postor. El laboratorio que ha desarrollado su vacuna de manera conjunta con la Universidad de Oxford alega que está teniendo problemas de producción en su planta belga y que ha priorizado el suministro a Reino Unido porque firmó antes el contrato con este país. Bruselas, sin embargo, exige que las vacunas de las fábricas británicas le sean enviadas porque en el convenio con el laboratorio se contemplaba la utilización de cuatro plantas ( 2 Reino Unido, 1 en Bélgica y otra en Alemania) para asegurar el suministro según los plazos estipulados, que por otra parte no dependían de la fecha de la firma de contrato.

Además, para comprobar que el laboratorio no está mintiendo sobre sus problemas de producción en su fabrica en Bélgica, las autoridades nacionales del país llevaron ayer a cabo una inspección y deben presentar un informe sobre sus conclusiones. El nuevo mecanismo significa que, en la práctica, Bélgica o Alemania podrán prohibir las exportaciones a Reino Unido o el resto de países que no pertenezcan al bloque, si observa que los viales parten hacía esos territorios mientras siguen sin llegar a los Veintisiete.