Meteorología

¿Cómo podemos saber la distancia a la que ha caído un rayo?

Determinar la distancia a la que ocurre una tormenta puede salvarnos la vida

Uno de los rayos que descargó la tormenta eléctrica del 30 de agosto por la noche en Hinojedo
Uno de los rayos que descargó la tormenta eléctrica del 30 de agosto por la noche en Hinojedolarazon

Los rayos representan un auténtico espectáculo de la naturaleza, pero también una amenaza real. Estas descargas eléctricas se gestan para nivelar un desequilibrio existente entre las cargas eléctricas de las nubes y la tierra. Durante una tormenta, los choques entre partículas de hielo dan lugar a la separación de las cargas eléctricas positivas y negativas. Las cargas positivas, o protones, se acumulan en la parte superior, mientras que las cargas negativas, o electrones, se congregan en la parte inferior.

Los rayos pueden desplazarse tanto entre nubes como de una nube al suelo. Algunos elementos en la superficie, como los pararrayos, tienden a cargarse positivamente, creando un desequilibrio que la naturaleza se esfuerza por corregir. Los rayos nacen cuando esta energía busca un punto opuesto para liberarse en forma de descarga eléctrica. Esta descarga puede resultar extremadamente peligrosa, por lo que es esencial tener precaución y saber cómo actuar si nos encontramos al aire libre durante una tormenta eléctrica.

Rayos sobre la localidad de Andratx, en Mallorca
Rayos sobre la localidad de Andratx, en MallorcaCaci CladeraAgencia EFE

La mejor opción, evitar la tormenta

La primera de las recomendaciones más comúnmente repetidas para evitar ser alcanzado por un rayo es también la más evidente: durante una tormenta, debemos mantenernos bajo techo. Sin embargo, esto no siempre es posible. A veces, la tormenta nos sorprende cuando estamos de paseo lejos de casa, complicando la búsqueda de refugio.

Es una situación en la que estamos especialmente expuestos. Primero, porque si estamos en la calle durante una tormenta, es muy probable que llueva. Y eso puede ser muy peligroso porque el agua es conductora de la electricidad. También deberíamos mantenernos alejados de las superficies sobresalientes, de alambradas y otros elementos metálicos, así como de los árboles.

Durante una tormenta, cualquier objeto puntiagudo puede convertirse en el objetivo de un rayo. Esto sucede porque el rayo buscará el mejor camino para llegar a la superficie… el más eficiente. Y el árbol tiene, por definición, muchas partes puntiagudas. Cada una de sus ramas puede convertirse en un foco de atracción para el rayo, sobre todo si están a gran altura.

Tampoco es una buena idea tumbarnos al suelo, porque eso, en realidad, aumenta las probabilidades de vernos afectados por un rayo cercano. La electricidad puede circular por el suelo, sobre todo si está húmedo. Una buena alternativa, si fuera posible, sería refugiarnos en un vehículo, con el motor apagado. Esto debería ser suficiente para mantenernos a salvo.

Como puedes ver, no tenemos muchas opciones que sean realmente seguras si nos encontramos en esta situación. Por eso, es importante que reaccionemos antes de exponernos a una situación similar. Si tenemos planeada una escapada al aire libre, debemos consultar los partes meteorológicos y desistir de subir a media o alta montaña ante el riesgo de tormenta.

Imagen de un rayo cayendo durante la tormenta de esta madrugada en Madrid.
Imagen de un rayo cayendo durante la tormenta de esta madrugada en Madrid.Jesús G. FeriaLa Razon

También deberíamos saber cómo reconocer si una tormenta se está acercando a nuestra posición, de forma que podamos tomar decisiones antes de que sea demasiado tarde. Saber la distancia a la que ha caído un rayo puede ayudarnos a entender la intensidad de la tormenta y si esta se está acercando o alejándose de nuestra ubicación. La fórmula que debemos aplicar para averiguarlo es muy sencilla:

Lo único que hay que hacer es contar los segundos que pasan entre que vemos el rayo y lo que tarda en sonar el trueno. Como la velocidad del sonido es de 300 metros por segundo, lo que tenemos que hacer es multiplicar los segundos que han pasado entre la imagen y el sonido por 300. Eso nos dirá la distancia aproximada a la que cayó. Por ejemplo, si vemos un rayo y pasan 5 segundos hasta que suena el trueno, lo que debemos hacer es multiplicar esos 5 segundos por 300 metros por segundo. De lo que deducimos que el rayo está a 1.500 metros de distancia.