Televisión

Aprenda inglés con Rachel y Ross en «Friends»

Hablamos con la dra. Ángela Larrea, coautora de «Las sitcoms como herramienta para el aprendizaje cultural en el aula de inglés»

Una de las más famosas escenas de la sitcom americana de la eterna relación entre Rachel y Ross
Una de las más famosas escenas de la sitcom americana de la eterna relación entre Rachel y Rosslarazon

No será usted el primero ni el último que nota que su nivel de inglés, lejos de situarle en posición de hablar fluidamente con un nativo, adolece bastante por falta de aprendizaje o vocabulario. Incluso puede que haya decidido que, gracias a las plataformas de streaming, ya es hora de ponerse las pilas y pegarse un atracón de series en versión original, con subtítulos en español, eso sí, para quitarse la espinita y poder chapurrear en cualquier viaje fuera de nuestras fronteras. Y aunque la iniciativa es buena, puede que esté haciendo un par de cosas mal, o por lo menos eso es lo que nos indica la doctora Ángela Larrea profesora del Departamento de Filología Inglesa y Alemana de la de la Universidad de Córdoba y coautora junto a Antonio Raigón del estudio «Las sitcoms como herramienta para el aprendizaje cultural en el aula de inglés».

Este año el periodista Mike Ives de «The New York Times» llamó a la doctora Larrea para conocer su opinión sobre la serie «Friends», con motivo del estreno en HBO Max de la famosa reunión que volvió a juntar a los amigos más famosos de la televisión. La filóloga, acostumbrada a escribir artículos sobre los beneficios de la televisión en el conocimiento de la cultura, explicó la finalidad educativa de utilizar comedias de situación (sitcoms) como herramienta de aprendizaje, como así hace en el máster de idiomas que imparte la UCO. «Nos centramos sobre todo en nuestra investigación, en el aprendizaje cultural e intercultural. Desde este enfoque se determinó que la enseñanza de lengua y cultura van relacionadas: No puede enseñarse el lenguaje sin enseñar cultura y no se puede entender la cultura de un país sin conocer la lengua», explica Ángeles Larrea a LA RAZÓN. Así que aprender el idioma incluye aprender la cultura correspondiente, ya lejos de los años 90, «donde todo era traducción y hablábamos inglés para imitar al hablante nativo; ahora es comunicación con todo el mundo».

Sin embargo este componente de «aprendizaje cultural» que debe conllevar aprender un idioma, «es muy difícil llevarlo a cabo en el aula de inglés», nos confiesa la doctora Larrea, que dice que es ahí cuando «empezamos con la idea un poco también de las sitcoms», que cayó un tiempo en desuso por «una vertiente académica de estudiar el componente cultural de los libros de texto», que concluyó que se trata de un aprendizaje «muy superficial, lo que se llama el inglés del turista (cosas de monumentos, la reina, el té…)». Así se deduce que los libros de texto «no abordan los valores de las otras sociedades». Sin embargo, sigue Larrea, « hay un campo académico desarrollándose en este aspecto, cómo las películas, la televisión, las sitcoms, pueden ayudar al aprendizaje cultural, siempre entendido como una herramienta más». Y la elección de las comedias obedece a que «tienen esa facilidad para los alumnos y es menos cansado, aunque se podría hacer con películas».

Pero es que las sitcoms, como nos aclara la profesora Larrea «permiten abordar temas sociales» porque «la televisión es un nuevo arte y hay muchísimas perspectivas que se pueden utilizar para estudiar». Como ejemplos, a parte de «Friends», y «Masters of None» (que utilizan en el seminario), Larrea habla de «Seinfeld», que aunque está entre sus favoritas y «culturalmente sí que se pueden sacar cosas, para aprender inglés quizá el lenguaje es un poco más desfasado» y, además: «El humor de ‘’Seinfeld’' es mucho más irónico y más en subtexto que el de ‘’Friends’'». Pero sentarse a ver una serie no garantiza aprender inglés: «Intenta sacar aspectos culturales, pero a lo mejor hasta que alguien no te los señala no te das cuenta. De ahí el valor del profesor». Y, por supuesto, defiende que se vean en versión original, y con subtítulos en inglés, a pesar de que entiende «que para la gente que no sabe inglés es complicado leer». También es buena idea haberla visto en español primero. Si al final se ha decidido, opte por la consabida «Friends», y Larrea nos sugiere también «Superstore», «asequible a nivel cultural y de vocabulario».