Los Lakers

«Tiempo de victoria», la realidad del «showtime»

HBO Max ya presume en su catálogo de su nueva serie sobre los años dorados de Los Ángeles Lakers de Magic Johnson en los 80

Tiempo de victoria: la dinastía de Los Lakers
Tiempo de victoria: la dinastía de Los Lakerslarazon

Los Ángeles no pasa por su mejor momento de baloncesto. Lebron James quema sus últimos años buenos en una franquicia que no le acompaña, Los Ángeles Lakers, después del anillo cosechado en el año de la burbuja, pasan ahora por una etapa de transición. Pero antes de Lebron la ciudad de Los Ángeles tuvo otro «rey», o rey mago en este caso, Magic Johnson.

Ahora HBO Max repasa aquella época dorada del baloncesto angelino que nacería en un draft que cambiaría la historia del baloncesto americano. «Tiempo de victoria: La dinastía de los Lakers» saca brillo al oro que relucía en los años 80 en Los Ángeles. Pero como ya se sabe, no es oro todo lo que reluce. En una recreación que cuida al detalle la estética e imagen de la época, se ridiculizan algunos de los clichés de aquellos años, envuelto todo en un aire vintage. Así, se renuncia al 4k y a la alta resolución para recuperar el ruido de antaño. Además, los actores rompen en muchas ocasiones la cuarta pared desafiando al espectador o riéndose de su propio personaje. En definitiva, «La dinastía de los Lakers» no deja de ser una parodia de la sociedad de aquellos días, con constantes guiños contra el racismo o el machismo.

En ese mundo de hombres que era la NBA de los 80 esta serie introduce varios personajes femeninos que irán reclamando su espacio y denunciando el trato que reciben, mientras que muchos de los masculinos son dibujados como el colmo de la ostentación y la apariencia. Dentro de la dirección de los Lakers hay dos personajes antagónicos que representan dos modelos de gestión. El nuevo propietario, Jerry Buss, con don de gentes, ciertos conocimientos de marketing y carisma, y el clásico empresario, con mano firme y para quien los negocios solo son cosas de números, rendimiento y confianza.

El reparto incluye a John C. Reilly como Jerry Buss, Quincy Isaiah como Magic Johnson o Jason Clarke como Jerry West. Entre los personajes recreados también está el mítico Kareem Abdul-Jabbar, máximo anotador de la historia de la NBA y que intervendría en la famosa película «Aterriza como puedas».

La producción está muy repartida entre Adam McKay, que también dirige el piloto, y desde Hyperobject Industries el productor ejecutivo Kevin Messick. Max Borenstein es el showrunner, guionista y cocreador, funciones en las que le acompañan Jim Hecht, Rodney Barnes, Jason Shuman y Scott Stephens. Sin embargo, el guion no parte de cero, sino que funciona como una adaptación del libro «Showtime: Magic, Kareem, Riley and the Los Angeles Lakers Dynasty of the 1980s» escrito por Jeff Pearlman.

A pesar de ser un relato ficcionado, esta serie de 10 capítulos (se estrenará uno cada lunes), recuerda al documental de Netflix con aquellas imágenes privilegiadas de los Chicago Bulls de Jordan, que a más de uno salvó del aburrimiento durante el confinamiento. Así «The last dance» sentó precedente sobre el gusto por los equipos y estrellas clásicas de la NBA. Al igual que el videojuego NBA 2K, que desempolva cada año a estas leyendas para añadirlas a su catálogo de personajes seleccionables. Así la NBA se autodefine como una industria que sabe cuidar la imagen de sus mitos por mucho tiempo que pase. De hecho, el estreno de esta serie coincidía con la celebración del All Star y el 75 aniversario de la competición, en el que la NBA ha querido recordar a sus mejores jugadores. De este modo, tampoco pueden faltar los homenajes sobre Kobe Bryant, que aunque ya tiene algún documental autorizado, no es descartable una serie en el futuro.