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Rajada olímpica en directo en RTVE: El monumental cabreo de Roi Groba

El micrófono abierto traiciona al presentador durante la cobertura de los Juegos Olímpicos de París 2024. Su enfado no pasó desapercibido en redes sociales

Rajada olímpica en directo en RTVE: El monumental cabreo de Roi Groba
Rajada olímpica en directo en RTVE: El monumental cabreo de Roi GrobaRTVE

Este domingo, durante la transmisión de los Juegos Olímpicos de París 2024 en La 1 de RTVE, se vivió un momento de alta tensión protagonizado por el periodista Roi Groba. El incidente comenzó cuando Groba y su compañero Alberto Freile, quienes cubrían el evento matutino, enfrentaron un cambio repentino en la programación que los dejó visiblemente desconcertados.

Todo se desarrolló mientras los presentadores comentaban el regreso de la gimnasta Simone Biles. Un cambio inesperado los obligó a pasar del boxeo al hockey femenino, sin previo aviso. Groba intentó mantener la compostura ante las cámaras, pero la confusión y las instrucciones contradictorias que recibía por el pinganillo le hicieron perder la paciencia. Sin darse cuenta de que su micrófono seguía abierto, expresó su frustración con un claro y sonoro: “Estoy intentando improvisar y me estás machacando la oreja, tío”.

La situación se complicó aún más cuando Alberto Freile, igualmente afectado por el desorden, cuestionó al equipo de producción con un enfático: “¿Qué coño ha pasado?”. Aunque el sonido se cortó poco después, el daño ya estaba hecho, y las quejas de Groba quedaron grabadas y fueron rápidamente compartidas en redes sociales.

El incidente recordó a muchos espectadores a un momento icónico protagonizado por Matías Prats durante el Mundial de Francia 1998, cuando un fallo técnico lo llevó a exclamar su famosa frase: “¡Pero esto qué es, pero esto qué es!”. Al igual que entonces, la situación de este domingo se convirtió rápidamente en tema de conversación en las redes, donde los usuarios no tardaron en comentar la "rajada" en directo de Groba y Freile, dejando en evidencia la presión y el caos tras bambalinas en la cobertura de un evento de tal magnitud.