Si hiciéramos un “zapping” por la historia de la televisión, diríamos que el papel de la mujer ha evolucionado mucho. Hemos pasado de la cosificación de Pamela Anderson en ‘Los vigilantes de la playa’ al retrato imperfecto de ‘Fleabag’. Las series son un reflejo de la realidad y sirven como testimonio de una tendencia que ha cobrado impulso en los últimos años. Aunque el ‘test Bechdel’ sigue advirtiendo de una cuota de representación inferior a la de los hombres, las protagonistas de la ficción televisiva han adquirido un punto de vista más poliédrico. Recientemente, hemos visto personajes femeninos que presentan facetas muy diversas de lo que significa ser mujer. Aquí te exponemos algunos ejemplos:

Dana Scully (Expediente X)

Gillian Anderson interpretó a una agente del FBI en Expediente X. El tándem que formaba con Fox Mulder se caracterizaba por una inversión de roles que resultaba muy novedosa. Scully representaba la razón y la ciencia. Un estudio del Instituto Geena Davis indica que el 50% de los espectadores aumentaron su interés por las carreras STEM gracias a Anderson, y el 63% de las mujeres que estudiaron estas carreras la consideran un referente.

Laura Lebrel (Los misterios de Laura)

Esta detective, interpretada por María Pujalte, lucha por equilibrar su carrera profesional y su vida personal. Es una mujer independiente que se niega a ser definida por su género. A menudo desafía estos estereotipos, como cuando se presenta en una escena del crimen usando ropa deportiva en lugar de su uniforme.

Daenerys Targaryen (Juego de tronos)

El personaje interpretado por Emilia Clarke se ha convertido en un icono de la cultura popular. Su importancia radica en su retrato de una mujer fuerte que lucha por la libertad y la justicia en un mundo gobernado por hombres.

Hannah Horvath (Girls)

Es la protagonista de la serie creada por Lena Dunham. La actriz y escritora interpreta a una mujer imperfecta, compleja y realista que lucha por encontrar su lugar en el mundo. Hannah desafía las expectativas de género al no cumplir con los estereotipos de belleza y comportamientos impuestos por la sociedad.

Grace Hanson (Grace & Frankie)

Este personaje, interpretado por Jane Fonda, abarca un rango de edad que no suele tener representación en la ficción. Muestra a una mujer madura que desafía los clichés asociados a la edad y que se hace un hueco en una sociedad que la invisibiliza.

Defred (El cuento de la criada)

Elisabeth Moss interpreta a un personaje que se erige como un símbolo de resistencia frente a un sistema opresor. La serie aborda temas como el patriarcado, la violencia sexual y la lucha por los derechos reproductivos de las mujeres.

Fleabag (Fleabag)

A través de su escritura y su interpretación, Phoebe Waller-Bridge ha desafiado el concepto de la ‘mujer perfecta’. ‘Fleabag’ presenta a las mujeres como seres humanos con defectos y virtudes. Utiliza la honestidad y el sentido del humor para hablar de temas relevantes y comprometidos.

Beth Harmon (Gambito de dama)

La protagonista de uno de los últimos éxitos de Netflix es una joven huérfana interpretada por Anya Taylor-Joy, que muestra cómo las mujeres son capaces de triunfar en campos dominados por hombres, haciendo un ‘jaque mate’ a todos los que dudan de sus capacidades.