Economía

El paro baja en 3.395 personas en Castilla y León durante el mes de abril con una caída del 3,01%

La Comunidad suma un total de 109.370 desempleados, 6.144 menos que hace un año

Llegan buenas noticias, en lo que al sector laboral se refiere en Castilla y León. El número de desempleados en la Comunidad se redujo en el mes de abril un 3,01por ciento al anotar 3.395 parados menos que en marzo, mientras en el conjunto de España la caída fue del 2,22 por ciento, al restar 60.503 personas más hasta los 2.666.500, la cifra más baja registrada desde septiembre de 2008.

De este modo, la Región sitúa la cifra total en 109.370 desempleados, 6.144 menos que hace un año, con un descenso del 5,32 por ciento, un punto más que la caída estatal, según los datos publicados este lunes 6 de mayo por el Ministerio de Trabajo y Economía Social.

Todos los sectores de actividad han impulsado el mercado de trabajo en abril en Castilla y León, con descensos generalizados del paro sobre todo en los servicios, con 2.397 desempleados menos que el mes anterior, mientras que han sido menores las bajadas en construcción, de 237; en agricultura, de 179; en industria, de 304, y en el colectivo sin empleo anterior, de 278.

Por provincias, Valladolid y Burgos encabezan los descensos absolutos del desempleo en abril, con 742 y 589 parados menos respectivamente, el 3,1% en el caso de Valladolid y el 3,96 en el de Burgos.

Sin embargo, los mayores descensos relativos se dieron en Soria, con 2.833 desempleados menos en abril (el 4,9% menos) y en Palencia con 6.355 menos (-4,67%).

La ocupación tuvo una evolución favorable en todas las provincias sobre todo en Ávila, con un crecimiento del 1,13 %, mientras que el resto de provincias anotaron aumentos que no superan el 1 por ciento.

Seguridad Social

El número de afiliados a la Seguridad Social en Castilla y León se elevó un 0,58 por ciento en la Comunidad en el mes de abril, al sumar 5.597 efectivos, lo que eleva la cifra total hasta 965.186. El crecimiento autonómico es inferior a la subida nacional, que aumentó un 0,95 por ciento, con 199.538 afiliados más que en marzo y un total de 21,1 millones. Sobre el dato de hace un año, Castilla y León registró un repunte del 1,97 por ciento, cuatro décimas menos del 2,36 por ciento nacional, con 18.625 efectivos nuevos en estos doce meses (486.516 más en el conjunto nacional).

Así lo indican los datos publicados por el Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, en los que se vuelve a superar los 21 millones de afiliados. En concreto, habla de una cifra de 21.073.339 trabajadores afiliados en abril, descontando la estacionalidad y el efecto calendario. Incluso, en los registros diarios se han alcanzado los 21,2 millones de cotizantes por primera vez, tras 48 meses consecutivos de aumentos. “Es el mejor dato de la serie histórica, después de haber sumado 480.653 en el último año”, destacó en un comunicado.

Añadió que el mercado laboral español marca un crecimiento de empleo superior al de las grandes economías europeas. En concreto, un 8,9 por ciento más frente al cinco por ciento de Francia o el 1,4 por ciento de Alemania, respecto al año prepandemia, informa Ical.

La afiliación en el último mes se comportó de forma similar en el mapa nacional, pues subió en todas las autonomías. Donde más crecieron los datos fueron en Islas Baleares, un 10,7 por ciento, seguido de Andalucía (1,2 por ciento), Murcia (1,1 por ciento) y Cantabria (uno por ciento). Mientras, los aumentos más moderados se produjeron en País Vasco (0,1 por ciento) y Aragón y Canarias (0,3 por ciento más).

En la Comunidad, ocho de cada diez afiliados se corresponden con el régimen general, con 779.922 personas, mientras que el resto son autónomos, con 185.252. El régimen general incluye el Sistema Especial Agrario, con 12.538 efectivos, y el Sistema Especial Hogar, con 14.954.

Por provincias, y en cuanto a la variación mensual, todas experimentaron subidas. El mejor comportamiento se registró en Ávila, con un 1,13 por ciento más, hasta los 56.151 afiliados, al sumar 627 en el último mes. Le siguió Soria, con un 0,89 por ciento más, hasta los 41.632, es decir, 367 más. Por debajo, Burgos, con un 0,69 más, hasta los 154.677, con 1.066; Palencia y Valladolid, con un 0,61 por ciento, hasta los 65.888 y los 227.976, respectivamente, con 400 y 1.377 más, en cada caso.

El resto presentó tasas de crecimiento más moderadas. Es el caso de Segovia, un 0,59 por ciento más (hasta 64.624, gracias a los 378 nuevos); León, un 0,44 de incremento (con 166.256 en total y 730 más); Salamanca, un 0,43 por ciento (127.615 y 540 por encima de hace un mes), y Zamora, un 0,19 (60.367 afiliados, con la suma de 113 nuevos en abril).

Por lo que respecta a la variación interanual, todas las provincias vieron crecer también sus cifras. La mayor subida se registró en Valladolid, con un 2,56 por ciento (5.693 más); Burgos, con un 2,31 por ciento (3.487 más); Soria, 2,19 por ciento (891); Palencia, un 2,08 por ciento (1.345); Salamanca, un 2,05 por ciento más de afiliación (2.565 personas más que en abril de 2023); Segovia, con un incremento del 1,79 (1.136 más); León, del 1,29 por ciento (2.124); Ávila, del 1,26 por ciento (697 más) y Zamora, del 1,15 por ciento (686 más).

Valoraciones

El consejero de Industria, Comercio y Empleo de la Junta, Mariano Veganzones, destacó los “importantes” datos del paro del abril, cuando el desempleo en la Comunidad, marcó un “mínimo histórico” para un cuarto mes del año. Veganzones ofreció una rueda de prensa en la sede de su consejería en Valladolid, porque en abril, dijo, la Comunidad, “batió el récord” de menor cifra de parados, que databa de 2007 (109.342), y logró reducirlo en 72 personas, hasta los 109.370.

Mariano Veganzones puso de relieve que Castilla y León “enlaza así 36 meses consecutivos de descensos interanuales” del paro en abril, un mes en el que se situó como la tercera autonomía en el ranking autonómico en la que más bajó el desempleo en términos mensuales.

El consejero aseguró que las cifras de abril constatan los datos EPA del tercer trimestre, próximos a los “mínimos históricos” y con una tasa del 10,3 por ciento, frente al 12,3 por ciento en España. Asimismo, remarcó que todos los sectores vivieron una bajada de las cifras de paro; así como todas las actividades, con especial relevancia en comercio al por menos y hostelería.

Mariano Veganzones comentó además que Soria fue la provincia donde más se redujo el desempleo en términos mensuales y Palencia la que más lo redujo en España en la comparativa interanual. Aseveró que cuatro de las siete provincias en las que más bajó el paro mensual son de la Comunidad.

Además, se congratuló de los datos de afiliación a la Seguridad Social, con un aumento hasta los 965186, el segundo dato más alto de la serie histórica solo por detrás de abril 2008. Ávila es la que más sube, agregó. En cuando a la contratación expuso que Castilla y León es la sexta autonomías en la que más crece en términos interanuales.

Mariano Veganzones echó mano del informe anual del Banco de España (BDE) para exigir reformas que permitan a “rebajar desempleo estructural” que sufre España “desde hace décadas” y “aumentar las oportunidades” en el mercado laboral. En este sentido, recordó que la media de paro en la UE se sitúa entre el 6 (zona euro) y el 6,5 por ciento (UE), donde España tiene la tasa más elevada y Polonia (2,9 por ciento), la inferior. Lamentó que el paro juvenil se sitúa en la UE entre el 14,1 y el 14,6 por ciento, mientras que en el conjunto nacional se eleva hasta el 28 por ciento.

Mariano Veganzones constató que el informe del BDE alerta de la falta de convergencia de España con la UE, de la que “estamos cada vez más alejados” por dos factores, la baja productividad y la baja tasa de empleo, “algo que no ocurre en Castilla y León, con dos puntos por encima de la media”.

En este sentido, relató que la capacidad de crecimiento de España “se verá condicionada sino se realizan reformas estructurales” para lograr el impulso de la productividad, la acumulación de capital humano, la inversión en capital físico, tecnológico e innovaciones; y una “sensibilidad de las cuentas públicas”, en un contexto de “falta de presupuestos” que supone un “pega importante”. El consejero denunció que existen “bolsas de vulnerabilidad en los hogares españoles que hay que abordar”.

Mariano Veganzones expuso que este contexto “requiere el diseño de una estrategia integral de reformas ambiciosas con vocación de permanencia”, algo que “se contrapone a la inseguridad jurídica que vive España, con la consiguiente pérdida de atractivo como destino inversor”. En este sentido, expuso que esa inseguridad jurídica radica en los anuncios del Gobierno sobre reformas en la legislación laboral, con la intención de que sean los jueces los que determinen las cuantías de los despidos, sin unas leyes con criterios objetivos que marquen las causas y las condiciones del despido. “Hay que modificar los umbrales regulatorios en el ámbito laboral, mejorar la definición de las causas objetivas de despido y reducir la incertidumbre en estos procesos”, dijo.

Asimismo, en relación a la reducción por ley de la jornada laboral, apeló a respetar siempre las negociaciones bipartitas entre empresarios y sindicatos, en las que determinen de forma libre los umbrales en las relaciones entre patronos y empleados. “El Gobierno no debe inmiscuirse en la negociación laboral. Los protagonistas deben ser empresarios y trabajadores”, razonó.

Veganzones también expuso que el informa de BDE alerta sobre la necesidad de actuar sobre le capital humano, potenciando la FP Dual, y la formación continua de los trabajadores, así como a hacer frente al “desajuste” entre la oferta y la demanda de mano de obra universitaria. Apeló en este sentido por una “revisión” de las políticas activas, que “deben mejorar la empleabilidad, y se deben acomodar a los cambios disruptivos tecnológicos apoyando a los trabajadores mayor edad”. En cuanto a las políticas pasivas, las prestaciones, abogó por ofrecer una adecuada protección pero “sin perjudicar búsqueda de empleo y la movilidad laboral”.

Mariano Veganzones defendió que el Gobierno es el responsable de acometer las reformas estructurales necesarias, y explicó que desde Castilla y León aplican medidas en la medida de sus competencias, lo que “explica el diferencial” que mantiene la Comunidad, respecto a la media nacional. “Estamos añadiendo un plus a las políticas del Gobierno”, dijo, para recordar su apuesta por la FP Dual, “una de las grades recetas”. “Nuestra política va dirigida a intentar derivar todas los recursos hacia la FP Dual y tenemos tres programas mixtos, para la primera practica profesional en organismos públicos y uno nuevo de formación dual en empresas”, dibujó.