Tiempo

Qué es la gnomónica, la ciencia que estudiaron los babilonios, los egipcios y las culturas precolombinas

Uno de los artilugios más utilizados para medir el tiempo basándose en el movimiento de los astros es el gnomon

Reloj de sol en el Museo Náutico del Mar Egeo (Mýkonos -Grecia-) | Fuente: Wikimedia / Ulises Icardi
Reloj de sol en el Museo Náutico del Mar Egeo (Mýkonos -Grecia-) | Fuente: Wikimedia / Ulises IcardiLa Razón

El estudio del tiempo y las astrología son dos campos del conocimiento absolutamente indisociables. Los seres humanos han observado los astros desde hace mileniospara decidir cuándo cazar, cuando sembrar y cuando recoger lo sembrado. Además, el estudio del cosmos también ha tenido un enorme impacto en la relación de todas las culturas con lo divino y espiritual.

Uno de los artilugios más utilizados para medir el tiempo basándose en el movimiento de los astros es el gnomon; que es una palabra griega antigua que significa “indicador”, “el que discierne” o “aquello que revela”. Técnicamente es un artefacto muy sencillo. Esencialmente, consiste en una varilla vertical clavada en el suelo que proyecta una sombra diferente en función del movimiento del Sol.

En la imagen, reloj de sol de pared de Sitges | Fuente: Wikimedia/Pablo Alejandro Araujo Granda
En la imagen, reloj de sol de pared de Sitges | Fuente: Wikimedia/Pablo Alejandro Araujo GrandaLa Razón

Sin embargo, estudiar en profundidad estos movimientos es algo tremendamente complejo, pero que permitió a los egipcios, los babilonios, los griegos, los chinos, los romanos y algunas culturas precolombinas hacerse una idea bastante acertada sobre nuestra relación con el cosmos y determinar la hora, la época del año, los equinoccios y los solsticios.

El primer gnomon del que se tiene constancia es el que fue descubierto en la provincia del norte de China de Shanxi, en un sitio arqueológico conocido como Taosi, que data del 2.300 aC. Aunque también se han encontrado evidencias de otras culturas que recurrieron a este artilugio. Por ejemplo, las pirámides de Egipto están alineadas en dirección norte-sur, este- oeste, lo que demuestra los grandes conocimientos de astronomía que tenían en esa época, muy posiblemente gracias a la adopción del gnomon. En cuando a su introducción en Europa desde Babilonia, se le atribuye al filósofo griego Anaximandro (610-546 a.C.).

Con tiempo y estudio, se fue refinando aquel sencillo mecanismo para dar lugar a relojes solares hipercomplejos. Tal vez por eso, a la ciencia de medir el Sol los griegos la bautizaron como “gnomónica”. Como tantas otras ciencias, la gnomónica se desarrollaría enormemente en la época grecorromana para decaer en la medieval. Aunque la cultura árabe -por su parte- nunca perdió el interés en el estudio del Sol. Y después -como tantas otras cosas interrumpidas por el medievo- resurgió con el Renacimiento.

Mecanismo del reloj de la Puerta del Sol
Mecanismo del reloj de la Puerta del Sollarazon

A partir del siglo XVII, los relojes solares quedaron relegados por la adopción de los relojes mecánicos... esto no fue así con la gnomónica, que sigue siendo motivo de gran interés para infinidad de aficionados. De hecho, hay asociaciones culturares repartidas por todos los países del mundo. Buen ejemplo de ellos es la Asociación Amigos de los Relojes de Sol, que es la entidad que agrupa a todos los gnomonistas de nuestro país desde el año 1988.