Polémica

Veronica Ivy estalla contra el veto a las atletas trans: “Los políticos quieren que nos asesinen”

La primera campeona mundial de ciclismo en pista transgénero ya provocó un sonoro escándalo al tachar a sus competidoras de “mediocres mujeres cis”

Verónica Yvi
Verónica YviTwitterLa Razon

La polémica sobre la participación de deportistas trans en competiciones deportivas femeninas no cesa. Corren malos tiempos para la “Ley Trans” y es posible que en España quede en saco roto sin haber pasado ni siquiera el trámite parlamentario. El deporte parece haber iniciado una senda revisionista respecto a las atletas transexuales y la creación de una nueva categoría así como las limitaciones a la edad de transición ya están encima de la mesa de los organismo internacionales que rigen el deporte. Esta semana varias Federaciones se han pronunciado a favor veto. Tras la natación, el atletismo y el fútbol, el rugby anuncia la exclusión de las deportistas trans tras se los primeros en pronunciarse sobre su exclusión en 2020.

La decisión pionera de la FINA de vetar a las nadadoras trans tras el escándalo Lía Thomas ha levantado ampollas en un colectivo que no ha tardado en responder con dureza. Una de ellas ha sido la ciclista transgénero Veronica Ivy que ha estallado contra la decisión del organismo rector de la natación de restringir la participación de atletas trans en las competencias femeninas de élite, y asegura que no hay ninguna investigación que justifique tales decisiones. Ivy también criticó los planes de Fina de explorar una categoría “abierta” como parte de su política que se aprobó luego de una votación en su congreso general extraordinario el pasado domingo, diciendo que tal movimiento no muestra respeto por los atletas trans.

La decisión de Fina, la más estricta de cualquier organismo deportivo olímpico, se produjo después de que los miembros escucharan un informe de un grupo de trabajo transgénero compuesto por figuras médicas, legales y deportivas. La nueva política de elegibilidad para las competencias de Fina establece que los atletas transgénero de hombre a mujer son elegibles para competir solo si “no han experimentado ninguna parte de la pubertad masculina más allá de la Etapa 2 de Tanner (de la pubertad) o antes de los 12 años, lo que ocurra más tarde”.

“No ha habido un solo estudio revisado por pares sobre nadadoras trans que demuestre que existe alguna ventaja competitiva para la transición posterior a la pubertad”, indica. “Entonces, señalar la pubertad como el punto de ruptura no se basa en ninguna evidencia, no se basa en que vean una ventaja para las mujeres trans, solo han observado a los atletas masculinos cisgénero en comparación con las atletas femeninas cisgénero”, continúa.

“Piden que seamos asesinadas”

Para la canadiense, la nueva política de la FINA no es el único error de la Federación. Según Ivy, las alternativas que el órgano plantea como futuribles también serían una equivocación. Principalmente, la creación de una categoría especial para deportistas transgénero. “Así no es como funciona esto. Cuando estás tratando de destacar a las mujeres trans, necesitas estudiar a las atletas trans... la FINA no ha hecho eso”, argumenta. Ivy, firme en su postura, no pasa por alto la importancia del caso Lia Thomas en todo lo acaecido, criticando duramente la situación estructural en la que viven las personas transgénero en los Estados Unidos: “Allí, las personas trans están bajo ataque... Personas que intentan prohibir los tratamientos y el acceso a la atención médica y el deporte... políticos que piden que seamos asesinadas”.

“Mediocres mujeres CIS”

Pero esta no es la primera vez que la ciclista alza la voz contra lo que considera un ataque injustificado a la transexualidad. El año pasado, Verónica Ivy, que se convirtió en la primera campeona mundial de ciclismo en pista transgénero al ocupar el primer lugar en el Campeonato Mundial Femenino de Pista Masters de la UCI en 2018 ya abrió la caja de los truenos. En su perfil de Twitter, la atleta criticaba a las mujeres que se quejan de perder competiciones contra “hombres biológicos” calificándolas de “mediocres mujeres cis (aquellas cuya identidad de género coincide con su sexo biológico)”.

Ivy escribió este mensaje tras la decisión de la Justicia de dar la razón a las estudiantes atletas Selina Soule, Alanna Smith y Chelsea Mitchell (y sus familias) que presentaron una demanda contra la Conferencia de Atletas Interescolar de Connecticut (CIAC) por una política promulgada en 2013 que permitía a cualquier atleta participar en deportes femeninos si se identifican como mujeres, permitiendo a mujeres transgénero (biológicamente hombres) competir en los deportes femeninos.

Un punto central de la demanda fueron las atletas transgénero Andraya Yearwood y Terry Miller, quienes han ganado 15 títulos combinados en diferentes eventos estatales. Yearwood y Miller son biológicamente varones, pero se identifican como mujeres y, por lo tanto, se les ha permitido participar en deportes femeninos. “Las chicas no deberían verse reducidas a espectadores en sus propios deportes. Permitir que los hombres compitan en la categoría femenina no es justo y destruye las oportunidades atléticas de las niñas”, argumentaban.

“En manos de rabiosas tránsfobas”

Este caso enfureció a la campeona de ciclismo que no ha dudado en atacar a todas aquellas mujeres que se sienten perjudicadas por la presencia a de deportistas trans en sus disciplinas y las acusa de ser marionetas “en manos de rabiosas tránsfobas”.

La reacciones a este mensaje no se hicieron esperar. “Varón autodeterminado mujer no solo roba medallas a las deportistas (Campeón mundial ciclismo femenino de pista 2018. Record velocidad 2019).También desprecia a las mujeres que pierden frente a varones llamándolas “mediocres chicas cis usadas como peones por rabiosas tránsfobas”, afirman desde el perfil del Twitter de la alianza feminista Contra el Borrado de las Mujeres.

Y añaden: “La imagen que ha elegido ese varón para ilustrar sus insultos a las deportistas es la de los atletas transgénero Andraya Yearwood y Terry Miller compitiendo contra chicas. Quedaron 1º y 2º. Tres chicas estudiantes se querellaron contra las escuelas de Connecticut por permitirlo”.

El COI establece que serán las federaciones las que decidan si optan por proteger el deporte femenino. De momento, las Federaciones de natación y rugby ya se han pronunciado. El futbol y el atletismo quieren seguir su senda. El debate sigue abierto y el veto parece imparable.