Tajo a las subvenciones

Los ganaderos tendrán menos ayudas de la UE y de España

La prohibición total de cazar lobos enfurece a las organizaciones agrarias

Vacas de raza menorquina
Vacas de raza menorquinaDavid Arquimbau SintesAgencia EFE

El sector ganadero se ha visto afectado en los últimos días por tres medidas que perjudicarán sus intereses. La primera tiene su origen en el Ministerio de Agricultura, a raíz de la aplicación de la convergencia acelerada de los importes de las ayudas directas decidida por Planas; eso ha supuesto recortes de los mismos que se han concentrado especialmente en los subsectores ganaderos de vacuno, ovino y caprino de leche y también en los de carne. Una parte de los titulares de explotaciones han visto cómo el montante de los apoyos que recibían se ha reducido, en el mejor de los casos, o directamente han sido expulsados del sistema en el peor. Las organizaciones agrarias, tanto las de carácter general, como las sectoriales, ya han protestado y no descartan la convocatoria de movilizaciones cuando las circunstancias sanitarias lo permitan. Por otro lado, esto es solo el comienzo porque para 2022 se anuncia otra vuelta de tuerca y nuevos recortes de las ayudas.

Para el año que viene, se anuncia otra vuelta de tuerca y más recortes en los subsidios para este sector

La segunda de las medidas tiene su origen en el Ministerio de Transición Ecológica dirigido por Teresa Ribera, que adoptará en los próximos días, tras la propuesta hecha por la Comisión Estatal para el Patrimonio Natural y de la Biodiversidad, una orden por la que todas las poblaciones de lobos de España quedarán incluidas en el Listado de Especies Silvestres en Régimen de Protección Especial. Eso supondrá que no se podrán cazar lobos en España. Actualmente, estaba permitida al norte del Duero, contando siempre con los permisos correspondientes. Durante los últimos años, la población de lobos ha aumentado y se ha ido desplazando hacia el sur, llegando a Madrid y a puntos de Castilla-La Mancha. En paralelo, se han incrementado también los ataques a explotaciones ganaderas extensivas, fundamentalmente en Castilla y León, Asturias, Galicia y Cantabria. Esta medida también ha provocado las protestas de las organizaciones agrarias y se ha adoptado con la oposición de las cuatro comunidades autónomas citadas anteriormente, según lo expresaron en la reunión de la citada Comisión.

Finalmente, la tercera de las medidas tiene su origen en Bruselas y se refiere, en este caso, al consumo de carne. La Comisión Europea ha presentado un plan de lucha contra el cáncer, en el que se anuncia que se fomentarán unas dietas alimentarias con más frutas y hortalizas y con menos carne roja y transformada. En este contexto, anuncia que modificará su política de promoción de los productos agroalimentarios europeos a finales de este año, reduciendo el apoyo a este tipo de carnes y otros alimentos vinculados a un mayor riesgo de padecer cáncer. De hecho, en el plan de este año, la mitad del dinero se destinará a promocionar productos y métodos de producción que respondan a los objetivos del Pacto Verde europeo, como la agricultura ecológica. Evidentemente, esta medida también ha sido valorada muy negativamente por las organizaciones agrarias de los principales países ganaderos de la Unión Europea.