Escrivá rebate al Banco de España: “Revalorizar las pensiones con el IPC no es discutible”

Ayer, el gobernador del Banco de España, Pablo Hernández de Cos, advertía de que Gobierno, empresarios y sindicatos debían “evitar el uso generalizado de cláusulas de indexación automáticas en las partidas de gasto que pudieran alimentar adicionalmente el actual proceso inflacionista” -tales como igualar subidas salariales a incrementos del IPC-. Por ello, estimó que esta desindexación debía ser parte del pacto de rentas y descartando aplicar cláusulas de revisión salarial de acuerdo con el IPC general sino, en todo caso, “con la inflación subyacente”.

Hoy, el ministro de Seguridad Social, José Luis Escrivá, ha apostado por todo lo contrario. En el adelanto de los datos de afiliación del mes de febrero -con una ganancia prevista de 146.000 afiliados de media y un “ligero aumento”, de unos 3.000 trabajadores, en ERTE ETOP- ha defendido que la revalorización de las pensiones debe hacerse conforme a la evolución del índice de precios de consumo (IPC) porque es una cuestión que “no es discutible”.

Según ha defendido, tanto la revalorización salarial ligada a la inflación como la de las pensiones está respaldada por la legalidad. En el caso de las pensiones, lo está doblemente, por la ley y por otras medidas de refuerzo de la sostenibilidad financiera y social del sistema público de pensiones, aprobadas en diciembre del pasado año. El titular de Seguridad Social ha insistido en que aún “hay tiempo para valorar” cómo afectará la situación actual a otras partidas presupuestarias, ya que faltan varios meses hasta que comience la preparación de los Presupuestos Generales del Estado para 2023, y ha querido remarcar que los miembros del Gobierno han demostrado que son “ágiles cuando hace falta”.

“El Ministerio de Hacienda contempla todos los diferentes escenarios”, ha sentenciado Escrivá, quien ha añadido que se debería tener en cuenta dos datos: la inflación y el cálculo de los ingresos, ya que “los dos van al unísono” y “lo importante es que estamos reforzando la evolución de los ingresos a la Seguridad Social”. Sobre este asunto, ha detallado que la recaudación va “muy bien”, unos seis puntos por encima del año 2019, un ingreso “extraordinario”. Por ello ha pedido “máxima tranquilidad”.

Respecto al aumento de esos 3.000 trabajadores en ERTE, cree que no hay “ningún sector ni de lejos para un ERTE sectorial”. Lo que está asegurada es la financiación de los mecanismos RED recogidos en la reforma laboral, el ministro de Inclusión ha apuntado que se ha habilitado a la Tesorería de la Seguridad Social para hacer pagos de las ayudas que irán a cuenta de los presupuestos generales del Estado (PGE). “No pensamos que vaya a tener efecto sobre el déficit público”, ha añadido Escrivá, que ha restado importancia a cómo se financien: “Cómo se financie es secundario”.