Energía

Europa compra hasta agosto más gas natural licuado que en todo 2021

Los países han disparado las importaciones de GNL para sustituir el suministro ruso

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InfografíaTeresa Gallardo

La necesidad de suplir el suministro de gas ruso antes de que llegue el crudo invierno ha llevado a Europa a buscar no sólo fuentes alternativas de abastecimiento vía gasoducto de países como Azerbaiyán sino también a mirar más allá, a aquellos países que pueden venderle gas natural licuado (GNL). Los países europeos han disparado las compras de este combustible hasta tal punto que, a finales de agosto, ya habían superado las que habían realizado en todo 2021.

Según los datos recopilados por Bruegel, el «think tank» con base en Bruselas, hasta mediados de septiembre, las importaciones europeas de GNL habían sumado 104,47 millones de metros cúbicos, frente a los 97,73 millones de 2021. La estadística de Bruegel procede de los datos que facilita la Red Europea de Gestores de Redes de Transporte de Gas (Entsog, por sus siglas en inglés), organización en la que están presentes los operadores de sistemas de transmisión de gas (TSO) nacionales de Europa, incluido el español Enagás.

El incremento del flujo de GNL procedente de países como Estados Unidos o Nigeria ha sido más que notable en países como Francia o España, con incrementos en el primer semestre del año del 74% y del 70%, respectivamente, según refleja otro análisis de Bruegel recogido en el mapa adjunto a esta información. En el caso español, la crisis diplomática con Argelia por el cambio de postura del Gobierno sobre el Sáhara Occidental y la posterior ruptura de relaciones entre ambos países ha provocado en el mismo periodo un derrumbe de las compras de gas vía tubo a Argelia del 40% que ha sido compensado con la compra masiva de GNL, principalmente a Estados Unidos. Esta rápida transición ha sido posible gracias a que España posee casi el 25% de la capacidad de regasificación de toda la Unión Europea dado que su condición de «isla energética» por sus escasas interconexiones con el resto del continente le llevaron, entre otras medidas, a realizar una importante inversión en regasificadoras.

Evitar cortes

No obstante, el país que más incrementó sus compras de GNL hasta junio fue Países Bajos, con un 83% después de reducir sus compras de gas a Noruega en un 26% en el periodo.

Ya antes de que Rusia cortase de forma indefinida el suministro de gas a través del gasoducto Nord Stream, y en previsión de que lo hiciera, la UE se había marcado un primer objetivo de asegurar que las reservas de gas de cada Estado miembro estén al menos al 80% de su capacidad el próximo mes de noviembre para afrontar el invierno con garantías y evitar escenarios de cortes de suministro como los que barajan algunos países. Pero también fija un umbral del 90% para las siguientes temporadas de invierno y un nivel de reserva del 85% de la capacidad total de almacenaje del conjunto de la UE este mismo año.