Luz y tinieblas en la economía: ¿va como un cohete?

Honoré de Balzac (1799-1850), el de «La comedia humana», de vida y finanzas azarosas, explicaba que «la duda tiene dos vertientes: la de la luz y de la de las tinieblas». Pedro Sánchez, en vísperas electorales, presume de que la economía española va «como un cohete». Sin embargo, al margen de que España mantenga el récord de paro, día tras día aparecen informes con diagnósticos mucho menos optimistas y, claro, generan dudas. La Fundación de Estudios de Economía Aplicada (Fedea), uno de los «think-tanks» –pensaderos– más respetados, indica que el 13% de los ocupados no trabaja o «trabaja cero horas» y claro, plantea el misterio de cómo es posible estar ocupado sin trabajar. Los mismos expertos han descubierto un diferencial de 800.000 parados entre los datos de la Encuesta de Población Activa (EPA), que elabora el Instituto Nacional de Estadística (INE) y los del ministerio de Trabajo de Yolanda Díaz. Es decir, más allá incluso de la polémica de los fijos discontinuos, con contrato pero sin trabajo, aumentan las dudas sobre el verdadero número de parados en España.

Fedea, en su Observatorio Trimestral del Mercado de Trabajo, que coordinan Florentino Felgueroso y Rafael Doménech, también detecta que la productividad en España es un 25% inferior a la de la media de los países de la Unión Europea, a pesar del teórico tirón económico, y que esa pérdida de productividad alcanza incluso al sector tecnológico, que debería ser puntero. El grave problema es que el valor agregado bruto (VAB) por hora trabajada en España en 2023 es similar al que tenía la zona euro en 1998, hace más de un cuarto de siglo. Por otra parte, otro «pensadero», el Instituto de Estudios Económicos (IEE), ha calculado, con datos de la Fundación Heritage, que España en un solo año ha perdido nada menos que 20 puestos en la clasificación del Índice de Libertad Económica y baja hasta el lugar 55. Además, el IEE ha detectado que el plan anticrisis del Gobierno de Sánchez, en la práctica ha beneficiado más a las rentas altas que a las bajas. Es decir, parece evidente que hay muchas dudas sobre la situación real de la economía española, dudas que van también de la luz a las tinieblas como aventuraba Balzac.