Patrimonio en el extranjero

Rato gana el pulso a Anticorrupción y evita ir a juicio por otros dos delitos

La Audiencia de Madrid rechaza el recurso de la Fiscalía y avala la decisión de que sea juzgado por blanqueo, delitos fiscales y corrupción entre particulares, pero no por insolvencia punible y falsedad

El ex vicepresidente Rodrigo Rato, tras declarar como testigo en el juicio del "caso Gürtel" celebrado en la Audiencia Nacional en 2017
El ex vicepresidente Rodrigo Rato, tras declarar como testigo en el juicio del "caso Gürtel" celebrado en la Audiencia Nacional en 2017SUSANA VERAREUTERS

El ex vicepresidente del Gobierno Rodrigo Rato irá a juicio por blanqueo, delitos fiscales y corrupción entre particulares, pero no por insolvencia punible y falsedad, como pretendía la Fiscalía. La Audiencia Provincial de Madrid ha rechazado el recurso de Anticorrupción para que el ex director gerente del Fondo Monetario Internacional (FMI) fuese juzgado también por esos dos delitos y ha ratificado el auto de apertura de juicio oral acordado el pasado 1 de junio por el juez que investigó el patrimonio de Rato en el extranjero, Antonio Serrano-Arnal, que excluyó expresamente esas imputaciones.

La Fiscalía -que pide para Rato penas que suman 70 años de prisión- reclamaba para él otros siete años de cárcel por ambos delitos -cuatro por insolvencia punible y otros tres por el delito de falsedad-.

Los magistrados de la Sección 23 de la Audiencia madrileña recuerdan en primer lugar que Anticorrupción ya expuso esa misma pretensión cuando recurrió el auto de transformación de las diligencias en procedimiento abreviado (equivalente al procesamiento) del pasado febrero y fue la propia Audiencia la que rechazó sus argumentos para ampliar los hechos objeto de investigación. “Lógicamente, ahora, no podemos sino desestimar el recurso, puesto que los hechos que daban soporte a dicho delito han quedado expresamente expulsados del procedimiento”, subraya la Sala.

Y en cuanto al delito de falsedad que también imputa la Fiscalía a Rato, los magistrados se oponen a que se abra juicio oral contra el ex ministro de Economía “respecto de un genérico, hipotético e indeterminado delito de falsedad que nunca ha sido objeto específico de imputación”.

El juez calificó de “sorpresivas” las acusaciones

Serrano-Arnal -que también abrió juicio oral contra otros 17 acusados, entre particulares y empresas- concluyó en esa resolución que “en momento alguno” se instruyeron las actuaciones ni se dirigió el procedimiento contra él “por tales infracciones”, que calificó de “acusaciones sorpresivas” que en su opinión introducían en el proceso “hechos no sometidos a contradicción, causando con ello una efectiva indefensión material de los acusados”.

El instructor -que impuso a Rato una fianza de 65 millones de euros para hacer frente a posibles responsabilidades civiles- también se opuso a que se juzgase al ex director gerente del FMI por un presunto fraude fiscal en el IRPF de los ejercicios 2014 y 2015, respecto a los cuales la Fiscalía había solicitado en 2018 ampliar el objeto del procedimiento.

Anticorrupción imputa a Rato once delitos fiscales por las cantidades que habría defraudado a Hacienda entre 2005 y 2015. Por cada uno de esos delitos, el Ministerio Público pide penas de entre cuatro y seis años de prisión, a los que suma otros seis años de cárcel por el supuesto blanqueo. La Fiscalía cifra en 15,6 millones el incremento que considera no justificado en el patrimonio del ex vicepresidente del Gobierno en esa década. Asimismo, sostiene que también se produjeron rendimientos de capital mobiliario en el extranjero que no fueron declarados a Hacienda.

La Fiscalía le acusa de defraudar 8,5 millones

Anticorrupción acusa a Rato de defraudar 8,5 millones de euros al ocultar supuestamente parte de su patrimonio a Hacienda desde 1999 a través de diversas sociedades (una irlandesa, dos panameñas y otra británica) con las que habría realizado “continuas actividades de inversión financiera mediante multitud de cuentas bancarias abiertas en Bahamas, Suiza, Luxemburgo, Reino Unido, Suiza y Mónaco, entre otros lugares, en una operativa desconocida por la Hacienda Pública y que habrían constituido” hechos imponibles desde 2005 hasta 2015 cuyo pago fiscal habría eludido.

Tras conocerse la petición de condena de la Fiscalía, Rato reiteró su inocencia y dijo sentirse “completamente indefenso” al denunciar que la acusación de Anticorrupción hace referencia principalmente a hechos y supuestos delitos que no han sido objeto de la investigación, “yendo contra el propio criterio del instructor, único director del proceso”. Además, mantiene que el dinero presuntamente defraudado está “perfectamente justificado”.

Rato fue absuelto de los delitos de estafa a los inversores y falsedad contable que le atribuía la Fiscalía -que solicitó para él ocho años y medio de prisión- por la salida Bolsa de Bankia. Sin embargo, el ex responsable del Fondo Monetario Internacional sí fue condenado a cuatro años y medio de cárcel por apropiación indebida por el uso fraudulento de las “tarjetas black”. En octubre del pasado año, se le concedió el tercer grado penitenciario.