Yolanda Díaz

Díaz arranca “Sumar” con un aviso a los partidos: “Sé que estáis hartos del ruido. La política es otra cosa”

La vicepresidenta prescinde de los partidos políticos para el inicio de su plataforma, arranca su plataforma exhibiendo músculo social con 5.000 asistentes y pide silencio para escuchar a la ciudadanía: “Ya está bien de que hablen los de siempre”

La vicepresidenta da un paso al frente en búsqueda de la sociedad civil. A la que ve alejada de la esfera política, por la desafección que muestran a diario las encuestas debido al clima de crispación que se vive en el Parlamento. Yolanda Díaz ha arrancado este viernes por la tarde en Madrid su “proyecto de escucha” que servirá de camino durante seis meses para testar el apoyo que recibe de la sociedad civil. Después, decidirá si se presenta o no a las próximas elecciones generales como candidata a presidenta del Gobierno, bajo unas alianzas que hoy por hoy se desconocen.

El acto estaba previsto para las 19:00h , pero las altas temperaturas han retrasado el evento en un intento de evitar que los asistentes esperaran al Sol, pero la plaza del Matadero de Madrid ya estaba al completo desde antes de la hora inicial. Más de 5.000 personas, según fuentes de “Sumar”, han arropado a la vicepresidenta.

El acto lo abrió, pasadas las 20h, la periodista Nerea Pérez de las Heras, que destacó además el hecho de que no hubiese en “Sumar” “cabezas de partido. Todo somos gente normal”. Explicó además, que se celebrarán actos de escucha “en cada rincón de España. Los futuros actos de “Sumar” serán así conversaciones con la sociedad en la que intervendrán diversas personalidades de la sociedad civil. Irene Rubiera; jurista y activista, ecologista, Valeria Castro; emprendedora digital; Fernando García: rider y sindicalista, Migue Ángel Castellano, representante de la lucha de los trabajadores, Carolina Darias; feminista y abogada y defensora de los derechos de las mujeres migrantes empleadas del hogar, y Belén González, psiquiatra.

Y tras una primera fase de escucha, la vicepresidenta del Gobierno manifestó que iba a “impulsar un movimiento ciudadano” y mandó varios mensajes velados a los partidos que la habían pedido que iniciara antes su proyecto de escucha. “Me dicen que voy lenta. Tenemos más de un año porque el roto es que corremos el riesgo de perder el país que queremos si no lo hacemos”. Sumemos pidió. “Pensemos el país que queremos”. Se refirió también al hecho de la desafección política que reflejan las encuestas. “Soy consciente de que lo hago en un momento muy difícil, con desafección ciudadana, pero me da igual lo que digan los estudios”.

Sin referencias a los partidos sí les mandó varios mensaje velados, sobre todo a los que la habían pedido que iniciara antes su proyecto de escucha, como Podemos. “Esto no va de partidos”, reivindicó. En su intervención reivindicó otra manera de hacer política. “Estáis hartos y hartas del ruido, del enfrentamiento, del no por el no. Pero la política es otra cosa; es escuchar, escuchar y escuchar”. A los partidos, sin nombrarlos de nuevo, pidió silencio. “Ya está bien de que hablen los de siempre”. Díaz empieza con la ciudadanía, porque lo fácil, dijo era «sumar con los partidos». Afirmó así que su plataforma “no va de partidos” y aludió al “ruido” que hay en política. Una referencia que utiliza habitualmente para pedir a las formaciones políticas que se alejen de este ruido, que a su juicio, les aleja de la ciudadanía. “Estáis hartos y hartas del ruido, del enfrentamiento, del no por el no. Sé que estáis hartas de esta forma de hacer política pero la política es otra cosa; es escuchar, escuchar y escuchar”. El reto que tenemos, dijo, es “ensanchar la democracia”.

En el acto de inauguración no ha habido «fila 0» porque la vicepresidenta ha pedido a las caras visibles de cada partido que se abstengan a acudir a la presentación de «Sumar». Un intento de dar protagonismo a la sociedad civil, según fuentes de la plataforma, pero que marca un camino claro en el que Yolanda Díaz se ha ido definiendo en este tiempo atrás. Alejarse de las organizaciones políticas en esta primera fase de su «proyecto de escucha». Así, la dirigente gallega consigue aislarse de los principales líderes de izquierda y de las marcas de partidos que considera «gastadas». Un mandato que causó malestar en las filas moradas, pero que acataron «por lealtad», según fuentes cercanas a la dirección que dirige Ione Belarra. Eso sí, confían en que en los próximos actos puedan tener un papel más destacado. El acto de ayer comienza a sonar demasiado al ideado hace meses por Mónica Oltra en Valencia. Una foto en la que tampoco se invitó a participar a las principales líderes de Podemos.

Yolanda Díaz ha preferido separarse de nuevo de los partidos políticos, a pesar de una reconfiguración de las fuerzas de izquierdas en mimbres y de la resintonización que se ha apreciado en los últimos días. Sin ir más lejos, la vicepresidenta se ha alineado con los morados esta misma semana, en su fuerte contra la cuota socialista en Moncloa a causa del aumento del Presupuesto en Defensa. La dirigente gallega ha endurecido así su perfil con un objetivo claro: comenzar a diferenciarse del PSOE en un momento muy claro, a pocos días de la presentación de su plataforma de unidad.

Los partidos

En representación de los partidos, Podemos ha enviado a tres representantes de su Ejecutiva, de menor perfil político, la secretaria de Acción Institucional y directora del Injuve, María Teresa Pérez, el responsable Círculos, Participación y Crecimiento Organizativo, Pau Vivas; y el secretario de Sociedad Civil y Movimiento Popular, Alex Zapico. También ha acudido la eurodiputada María Eugenia Pallop, Por cuenta propia, ha acudido el ex cofundador de Podemos, Juan Carlos Monedero. Por parte de los comunes, los diputados Aína Vidal y Joan Mena. Desde Izquierda Unida, la dirección federal estuvo representada por su portavoz, Sira Rego, el secretario de Estado y responsable de Justicia de la formación y líder del PCE, Enrique Santiago, y la miembro de la Comisión Colegiada y consejera de Transparencia del Gobierno valenciano, Rosa Pérez.

Del lado de Más País se desplazó la diputada andaluza Esperanza Gómez, para representar a la formación de Íñigo Errejón. Por Compromís, una representación tripartita con Isaura Navarro (Iniciativa) Marian Campello (Mes) y Paula Espinosa (Verdes-Equo) mientras que en Alianza Verde, la formación Ecologista de Unidas Podemos, habrá al menos un representante de su Ejecutivo pero no será su coordinador Juantxo López de Uralde.

Más de 5.000 asistentes

Y Díaz exhibió músculo ante todas las organizaciones. Respaldo social. 5.000 personas según fuentes de la plataforma. Una masiva afluencia desde media tarde, a pesar de las altas temperaturas, esperaba el inicio de «Sumar». Arropada de cargos orgánicos de perfil medio y personalidades de la cultura como el pianista James Rhodes, la escritora Elisabeth Duval, o la poetisa Elvira Sastre, entre otros. También el presentador Quique Peinado. También estaba previsto que acudieran los actores Antonio de la Torre y Luis Tosar, pero finalmente, por motivos personales no han podido acudir, pero han grabado un video, a modo simbólico para apoyar la suma. El escritor Bernardo Atxaga o el músico Kiko Veneno, entre otros.

Sobre “Sumar” todavía quedan muchos detalles por anunciar. La vicepresidenta y su equipo siempre destacan que se trata de una “gira” autonómica, alejada de los tradicionales mítines electorales -lo que hace pensar que la presencia de los líderes de partidos políticos siga siendo mínima- con el objetivo de apelar al diálogo, a la sociedad y a sus necesidades. La vicepresidenta quiere sentirse cercana a la ciudadanía que quiere interpelar, conocer sus necesidades, para -después- si lo decide- traducirlo en las bases de su programa electoral.

El proyecto de escucha quiere atraer al votante progresista. No se resigna, además, a convencer a la izquierda del PSOE, sino que la propia vicepresidenta aseguró que aspiraba a los votantes del propio PSOE. Los propios estatutos de Sumar apuestan por “fomentar y fortalecer” la participación en política de la sociedad civil para “mejorar la calidad democrática y el desarrolla humano”.