"Hipocresía"

Bildu «se acuerda» de las víctimas tras las cesiones de Moncloa

Las asociaciones rechazan la «empatía» de Aizpurua y exigen que asuman responsabilidades y condenen el terrorismo y la tildan de “hipócrita”

«En política nada es gratis» es una expresión que se usa con recurrencia en el Congreso y se ajusta gráficamente a lo que está ocurriendo en los últimos tiempos entre el Gobierno y Bildu, que se necesitan mutuamente. Pedro Sánchez, para sobrevivir en Moncloa, y la izquieda abertzale para tener influencia y ganar visibilidad y catapultarse en la lucha que mantiene con el PNV por el poder en el País Vasco.

En este escenario se enmarcan los acuerdos entre Gobierno y Bildu durante esta legislatura: la izquierda abertzale estaba relegada al ostracismo, pero Sánchez los ha rescatado como socios de gobierno, aunque cada acuerdo parece seguir un patrón. Ha ocurrido ahora con la ley de Memoria Democrática y ocurrió en octubre, cuanto Otegi empleó también ese “sentimos su dolor. Nunca debería haberse producido” en la previa de la negociación de los presupuestos: Bildu muestra su versión más «empática» cada vez que se negocia alguna cosa importante con Moncloa y dedica palabras a las víctimas del terrorismo, como forma de edulcorar cualquier acuerdo y darle un pátina de normalidad.

Sin embargo, eso es muy difícil de conseguir porque, entre otras cosas, Bildu sigue sin pedir «perdón» o condenar los asesinatos, algo que las víctimas siguen exigiendo. En este sentido, la portavoz de Bildu en el Congreso, Mertxe Aizpurua, ayer dedicó nuevas palabras de recuerdo para las víctimas: «Queremos decirles de corazón que sentimos enormemente su sufrimiento y nos comprometemos a tratar de mitigarlo en la medida de nuestras posibilidades». Si bien, tampoco bastaron para las asociaciones de víctimas.

La presidenta de Covite, Consuelo Ordóñez, reseñó que, las palabras de Aizpurúa, no son ninguna novedad. En este sentido, recordó que ya en octubre pasado Otegi estaba diciendo lo mismo y ya le respondieron. «La izquierda abertzale sigue teniendo las mismas asignaturas pendientes: condenar sin paliativos el terrorismo y condenar el fanatismo en el que están anclados y asumir la responsabilidad que han tenido en la existencia de ETA, en todo el dolor que causó ETA, desde el primer atentado, hasta el último», señaló Ordóñez, en declaraciones a este diario. Además, subrayó que «esas palabras no se corresponden con los hechos». «¡Si todos los días están tratando a los asesinos de nuestros familiares como presos políticos, como gudaris!, y luego, encima, pidiendo la amnistía. Los quieren en casa, los quieren fuera de la cárcel porque consideran que por matar a nuestros familiares no tienen que estar encerrados. Eso es incompatible con decir luego que siente el sufrimiento que nosotros padecemos. No sentís nada, sois unos hipócritas», áfirmó Ordóñez.

El consejero de la AVT, Miguel Folguera apuntó que «las víctimas lo que esperamos de Bildu es que digan que ningún atentado cometido por ETA tuvo justificación alguna. Y, si de verdad quieren reparar a las víctimas, que empiecen exigiendo a los miembros de ETA y a muchos de ellos que colaboren con la justicia para el esclarecimiento de los casos pendientes».

Para el presidente de Acvot, José Vargas, «lo que diga Aizpurua, no me merece ni dos segundos de atención, no puedo darle ninguna credibilidad a sus palabras por mucho que se empeñe». Dice que nada se puede esperar de esa «impresentable». Vargas considera que, después de lo que se ha montado por lo de la «desmemoria democrática», «tiene que justificar todo lo que les están dando». Además, «es vomitivo para las víctimas que esta infame mujer, condenada por terrorismo, emplee la palabra ‘víctima’. ¿Qué tenemos que hacer las víctimas? ¿Agachar la cabeza y decirle amén a todo lo que digan y pedirle perdón por los agravios que les hacemos? ¿A qué adversario se refiere?». Al tiempo que, recuerda, que «aquí solo había asesinos que pertenecían a su entorno y las víctimas que poníamos el sufrimiento y el dolor». Por ello, el presidente de la asociación catalana de víctimas insta a no caer «en el relato que nos quieren imponer para lavar sus manos manchadas de sangre, igual que las del presidente del Gobierno más nefasto de nuestra democracia y apoyo incondicional para los terroristas».