Agente secreta Leire: "Yo hago selección natural de rojos"

Hoy jugamos a ser Leire Díez. Si la «fontanera» del PSOE intentaba sacar los trapos sucios del teniente coronel de la UCO que investiga los casos del hermano y de la mujer del presidente del Gobierno, ¿por qué no tender al sol los suyos? Las tuberías, amiga, hay que tenerlas bien limpias. Pero es que a nuestra Anacleta, agente secreta, ni le rondó por su cabeza, adicta al tinte, que un empresario con nombre de flautista, al que seguían las ratas, y arrestado por un fraude de combustible de 154 millones, le iba a dejar con las posaderas al descubierto tras filtrarse unas conversaciones en las que se llegó a escuchar: «Si Balas (del Instituto Armado) está muerto, mejor». El cazador, cazado.

La Mata Hari de Vega de Pas, amante del croché –el de ganchillo, no el gancho de boxeo– lleva una semana «horribilis». Ahora intenta relajarse apurando el libro «El albatros negro» de María Oruña. ¡Cómo le gustan a esta mujer las novelas de misterio! En esta, y sin ánimo de hacer un spoiler, hay un secreto oculto y muertes inexplicables. Vaya, vaya... Y, entre página y página, trata de digerir que ese Partido Socialista que tiene impregnado en cada poro de su piel rehúye de ella como de la peste. «¿Leire, qué Leire?». Ni siquiera parece conocerla su amigo Pedro Casares, secretario general del PSOE cántabro y portavoz de Economía en el Congreso, de quien se convirtió en una auténtica «groupie» en las primarias de febrero. Ni mu ha dicho sobre el tema. Mientras, quien ha sufrido sus ataques ha sido su archienemigo Pablo Zuloaga, diputado socialista en el Parlamento cántabro y anteriormente delegado del Gobierno en Cantabria y alcalde de Santa Cruz de Bezana, un municipio por el que Leire Díez tiene especial fijación.

Sus fotos con Sánchez y Begoña

Llama la atención que una avezada investigadora como ella (y periodista de raza) haya dejado, tras estallar el escándalo, abiertas de par en par sus redes sociales a merced de alguno de esos medios a los que llama «camorra quinqui». Es de primero de infiltrado no dejar rastro. Pero le puede su megalomanía y ahí quedan para la posteridad sus imágenes con Pedro Sánchez y con su mujer Begoña, con quien compartía carnaza hace años en un lugar parecido a la sala de un bingo en hora punta.

Ella presume de sus amistades socialistas, pero tampoco pierde el tiempo en arremeter contra compañeros como Maite Esteban, secretaria de Organización del PSOE en Santoña y miembro del Comité Regional de Cantabria, ni contra Fermín Aja, portavoz en Vega de Pas, a los que tiene ojeriza. Pero es que para la Colombo pasiega hay que distinguir: «Yo hago selección natural de rojos», dice con orgullo. Porque tiene olfato. Defendió a José Luis Ábalos ante sus fiestas locas con sus amiguitas e invitaba a los periodistas (como ella) «a dar un puñetazo en la mesa» ante esas publicaciones.

Si acaba en los tribunales, compadeceré al juez. Ya puede haber vivido como un monje porque Leire está ya en la tienda del espía

Y, como agente doble, también posaba con el abogado de una empresa que quiso, aunque la Audiencia Nacional lo desestimó, personarse en el «caso Koldo». Ya saben, el asesor de su «inocente» Ábalos. El que seguro encabeza su lista negra de rojos es el presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, tras haber apremiado a su partido a no mirar hacia otro lado e incluso a llevarla ante el juez. Compadezco al magistrado que se haga cargo de la causa. Ya puede haber pasado su vida en un monasterio benedictino, porque Leire debe estar ya de compras en la tienda del espía.

Pero sus tejemanejes vienen de lejos. Como cuando en el año 2011 le «robó» las elecciones al alcalde de su pueblo a través del voto por correo, como si fuera la final de Eurovisión. Convenció con su verborrea, según apunta el exregidor, a la gente mayor y a los del asilo para que dieran el papelito. ¡Qué feo es eso! Agentes de la Guardia Civil encontraron unos cuantos en una papelera. Quizá de ahí le venga esa especie de trauma no tratado con la Benemérita.

Leire Díez es de esas de «a Dios rogando y con el mazo dando». De la infinidad de autores, filósofos o «coaches» emocionales de los que echar mano, escoge la frase de un pastor predicador norteamericano de una radio cristiana evangélica, Charles Rozell Swindoll «Chuck», para hacerla suya: «La vida es un 10% lo que te sucede y un 90% cómo reaccionas a ello». Pues nada, aquí sentados esperamos tu reacción más allá de que te documentas para un libro. Reza, Leire, reza.