Realeza

¿Dónde está Lalla Salma?, la ex mujer de Mohamed VI que quiso tomar el poder

La figura de la que fue la mujer del monarca alauita resurge fantasmal cada vez que Marruecos salta a titulares. Un allegado a esta casa real lo detalla

El rey Mohamed VI y Salma Bennani
El rey Mohamed VI y Salma BennaniRoyal PalaceAP

El 21 de marzo de 2018, la revista «¡Hola!» anunció en su portada que el divorcio del rey de Marruecos y de su esposa se había consumado. No fue hasta el mes de abril de 2019 que Lalla Salma volvió a aparecer en público. Desde entonces su ausencia ha destapado todo tipo de bulos, que salen a luz con fechas clave de la corte alauita, ya sea la mayoría de edad del primogénito o ahora con la crisis migratoria. La desaparición pública de la princesa dio paso a todo tipo de especulaciones en medios extranjeros: desde un posible exilio a EEUU a un posible encierro sin posibilidad de ver a sus hijos. Lalla Salma resurgió entonces de nuevo en abril de 2019, a través de unas fotografías en las que parecía que cenaba con su hija y algunas amigas en la plaza Jemaa el Fna de Marrakech. LA RAZÓN ha podido hablar con una persona cercana a la monarquía del país vecino y que ayuda a esclarecer la situación de la que fue esposa de Mohamed VI.

Este allegado explica que desde el momento que hay un divorcio, Lalla Salma deja de tener representación oficial y su trabajo público se finiquita, es por eso normal que deje de aparecer en eventos públicos, ya que ha dejado de tener este cometido. «En la sociedad marroquí es imprescindible que toda persona que tenga estatus ejerza algún tipo de actividad de índole social, con carácter benéfico, más allá de que sea un dictado de protocolo es un mandato del Islam. Ella ha dejado de ser persona pública, actualmente su trabajo es la crianza de sus hijos y es normal que no se exponga en eventos públicos. No hay más misterio», relata.

Mohamed VI y la princesa Lalla Salma durante su boda en 2002
Mohamed VI y la princesa Lalla Salma durante su boda en 2002larazon

Aún así , Lalla Salma sí ha hecho contadas apariciones, muchas de ellas motivadas por la presión que ejercen los medios de comunicación. Visitó antes de la pandemia un hospital de Beni Mellal, en el centro de Marruecos. Allí conversó con el equipo médico y con algunos enfermos, según el diario digital marroquí «Goud», el cual publicó una foto de la princesa rodeada del personal sanitario del centro. Como los rumores no cesaban y se ampliaban a los tres hijos de la pareja, señalando que el padre había hecho rehén a la pequeña de 12 años impidiéndole viajar al extranjero, el ex matrimonio publicó un comunicado conjunto. En él ambos aseguraron al unísono que «El soberano y la princesa, padres de dos adolescentes (…), desmienten formalmente y con rotundidad estos rumores». Después del comunicado, en septiembre de 2019, se facilitó que la prensa accediera hasta imágenes inéditas hasta la fecha. Nunca había sido fotografiada en el extranjero con sus hijos. La princesa, junto al príncipe heredero de Marruecos, Moulay Hassan, que entonces tenía 16 años, y la princesa Lalla Khadija, dos años menor que su hermano, aparecían en Nueva York, de compras. Un mes después, la princesa volvió, de manera sorprendente, a la agenda oficial, al inaugurar una exposición en Rabat, la muestra «Tesoros del islam en África: de Tombuctú a Zanzíbar». «Y aún así los rumores crecen ahora con la mayoría de edad de Moulay Hasan. Ciertos medios españoles han publicado que si había preocupación en Marruecos por la afinidad del heredero con su progenitora. Lo cierto es que los tres hijos de la pareja real pasan más tiempo con su madre que con su padre. Él tiene obligaciones de Estado con compromisos frecuentes y ella está volcada en el cuidado de los hijos sin apenas proyección pública. El heredero es un joven muy unido a su madre, pero no enmadrado en el sentido peyorativo del término», recalcan.

Lalla Salma en una imagen de archivo.
Lalla Salma en una imagen de archivo.larazon

Alejada de su esposo

Nuestro interlocutor incide que el papel de la mujer en la alta sociedad marroquí no está relegado a un segundo plano, como sí «puede ocurrir» en estratos sociales más desfavorecidos. «Parte del problema con Lalla Salma vino por ahí, por el poder que tiene la mujer en la sociedad marroquí, sobre todo en el seno de la familia. Ella intentó desunir a una familia muy unida. Se comportó como una reina con las tres hermanas del monarca y ella fue creando cada vez espacios más independientes que la fueron alejando de su esposo. El resultado fue el divorcio. Meriem, Hasna y Asma, a las que el monarca siempre ha estado muy unido, tenían una opinión muy clara sobre ella. Ha sido la fuerza de la sangre que ha pesado más que el matrimonio. Ellas mismas están divorciadas de hombres que tampoco eran del círculo real y siempre han contado con el apoyo de sus hermanos Mohamed (el rey) y el príncipe Moulay Rachid, más que un hermano, mano derecha del monarca alauita». A la pregunta de si Salma sigue viviendo en la residencia de Dar es Salam, en la periferia de Rabat, donde estuvo siempre alojada desde que se casó con Mohamed VI, nuestro interlocutor responde: «como madre de los hijos del Rey siempre estará en un sitio adecuado para su condición», finaliza.