El hijo de Mette-Marit acusado de recibir un trato de favor tras su detención

Marius Borg vuelve a estar en el centro de la polémica. Según ha publicado la revista noruega "Se og Hø", dos agentes de la brigada criminal visitaron al hijo de Mette Marit para advertirle de forma informal que su nombre podría estar involucrado en una investigación de tráfico de drogas, debido a su relación de amistad con varios implicados en actividades delictivas.

Esta información ha provocado una oleada de críticas que han salpicado a la Casa Real, también este trato de favor a Marius ya que la policía ha sido acusada de vulnerar sus propias normas y de proteger al hijastro del heredero al trono.

Marius fue arrestado, tras protagonizar un altercado violento con su novia, Rebecca Helberg Arnstsen, en Oslo. El hijo de Mette-Marit se encontraba bajos los efectos del alcohol y de la cocaína, cuando confesó la agresión. Tras su arresto fue puesto en libertad bajo fianza, pero enfrenta otras denuncias por violencia de otras exnovias como Juliane Snekkestad y Nora Haukland.

Además, en los últimos días, la abogada de Arntsen ha revelado que se ha impuesto una orden de alejamiento de seis meses contra Borg, prohibiéndole acercarse a su novia. Esta medida estará vigente hasta marzo del próximo año.

Marius Borg ha reconocido tener problemas de salud mental y de abuso de sustancias, por lo que se ha comprometido a retomar el tratamiento para superar sus adicciones.