Conflicto

Rocío Carrasco desata la ira de Raquel Mosquera llamándola “mala” y “tonta”

La viuda de Pedro Carrasco está muy molesta con la hija de su difunto marido

Raquel Mosquera y Rocío Carrasco
Raquel Mosquera y Rocío CarrascoGtres

El durísimo enfrentamiento entre Rocío Carrasco y la viuda de su padre, Raquel Mosquera, no tiene fin, es más, se recrudece intensamente tras los últimos ataques de la hija de Rocío Jurado contra la peluquera, a la que, entre otras lindezas califica como “mala y tonta”.

La reacción de Raquel no se ha hecho esperar y ha sido en forma de cariñosas palabras y fotografías colgadas en sus redes sociales. Unas frases llenas de amor hacia el marido ausente y unas imágenes cargadas de emotividad suprema.

Como sabrán nuestros lectores, la hija de Rocío Jurado no se cansa de repetir que su progenitor, Pedro Carrasco, murió enamorado de la cantante y no de su esposa oficial, algo que Mosquera niega rotundamente.

Raquel Mosquera, Pedro Carrasco y su hija Rocío
Raquel Mosquera, Pedro Carrasco y su hija Rocíolarazon

Pero en su fuero interno el dolor persiste, las acusaciones de la Carrasco, quiera o no, le afectan demasiado. Es una mujer fuerte pero no insensible. Y la campaña de desprestigio contra ella por parte de la actual mujer de Fidel Albiac hacen mucho daño de cara a la opinión pública.

Quien esto escribe tuvo la ocasión de mantener una cierta amistad con Pedro, y el boxeador nunca dejó entrever que siguiera enamorado de Rocío, al, contrario, lo suyo con la peluquera fue pura pasión. Cuando contrajeron matrimonio en el pueblo natal de Carrasco, el onubense Alonso, los invitados pudimos presenciar las grandes muestras de amor del mítico deportista con la que ya se había convertido en su esposa.

Durante los años que estuvieron juntos hasta el fallecimiento de Pedro el 27 de enero del 2001, este último acudía al lugar de trabajo de Raquel, su peluquería de un centro comercial de Las Rozas, el Burgocentro, para acompañarla en la cafetería “El jamoncito” y comer juntos. Al igual que solía hacer, siempre que le era posible, por las noches, cuando la recogía para llevarla a casa.

Es evidente que sentía cariño por su es mujer, pero era simplemente eso, un cariño de amigo. Su amor era todo para Raquel Mosquera.