La cantante, que el próximo 28 de febrero lanza un documental sobre su vida privada bajo el título "Metamorfosis", ha confesado en La Ventana, de Cadena Ser, que padece depresión desde hace un año y que va a terapia. "A finales del año pasado pasé una etapa complicada. Complicada a nivel psicológico", comenzaba diciendo Aitana. "Creo que es importante hablar sobre eso. Estoy pasando por ese proceso... Estoy en en ese proceso en realidad", añadía, sin querer hace spoiler sobre el contenido del documental de Netflix.

"Estoy muchísimo mejor, creo que la depresión es igual para todos, es estar triste pero no saber por qué. Es la primera vez que lo digo públicamente. Todo se explica en el documental... y estos momentos da la sensación de ¿qué está pasando? Ni yo misma lo sabía, era difícil de nombrar", ha explicado Aitana sobre su proceso de sanación en el que está inmersa.

Además, la artista ha reconocido que "me cuesta mucho decir estas cosas, no por sacar mi vulnerabilidad a relucir, sino porque se puede ver desde fuera como problema del primer mundo". La catalana confesaba que incluso ha llegado a sentirse culpable por padecer depresión.

Aitana ha confesado además que padece hipocondria. "Es algo que se explica en el docu y ya lo veréis. Es muy fuerte lo que voy a decir, pero lo voy a decir... Yo nunca había hecho terapia de hipocondriaquía. Yo no me daba cuenta de que tenía una cosa que era demasiado... que no era un poco hipocondriaca, era muy hipocondriaca. Es mucho. Llega un momento... un nivel de locura que por eso tuve que empezar terapia, para cambiar mi mente en ese aspecto".

También ha narrado cómo "desde pequeña" ha tenido un miedo atroz a la muerte: "Siempre he pensado que tenía algo. He tenido mucho ese miedo: el de la muerte". "Desde pequeña pensaba que siempre me pasaba algo. No quería ir al médico para que no me viesen nada. Me comía mi movida en mi cabeza. Cuando me preguntaban dónde me veía en cinco años yo pensaba que no iba a estar", añadía.

A sus 25 años, la cantante de "Mariposas" o "Segundo intento" admite que supera el miedo en el escenario. Lo hace por responsabilidad ante su público. "Siento que todas las inseguridades que tengo fuera no las puedo poner en juego ahí encima, me quito de muchas tonterías que tengo en mi día a día. La gente ha pagado por venir a verme y no puedo fallar lo más mínimo porque no sé lo que les ha costado conseguir la entrada, cuánto han tenido que trabajar o cuánto les ha costado venir desde otra ciudad".