Cayetano Rivera, despedida en La Maestranza: lágrimas, orgullo y ausencias

Cayetano Rivera vivió el sábado una tarde cargada de simbolismo entrecruzando orgullo y, al mismo tiempo, nostalgia; alivio y un duelo que está por llegar ante la despedida de una forma de vida a la que ha entregado su vida. Pero fue, sobre todo, una tarde de gratitud y reconocimiento del público, un momento solemne en el que la plaza de La Maestranza de Sevilla le rindió su particular homenaje por las faenas vividas, las heridas y el doble apellido taurino que ha paseado durante veinte años por los ruedos.

En su despedida de Sevilla, sin demasiada gloria según la crítica taurina, contó con la presencia de numerosos familiares y amigos, como José María Michavila y Alejandra Salinas, Cayetano Martínez de Irujo o el Padre Apeles. También su tío Antonio Rivera, su sobrina, Tana Rivera, junto a su pareja, Manuel Vega, y su hermano Curro.

La gran sorpresa fue la asistencia de su hermano Kiko Rivera, que, apostado en un burladero, siguió de cerca cualquier detalle de la despedida del torero, lo que delató que su cariño fraternal está por encima de los conflictos derivados de la herencia de Paquirri y la gestión de algunos de sus bienes personales por parte de Isabel Pantoja.

¿Francisco Rivera ausente?

Llamó la atención en este emotivo adiós que no se viese a Francisco, lo que podría confirmar los rumores sobre el distanciamiento entre hermanos. Tras la corrida, el diestro atendió a la prensa y admitió una doble sensación de felicidad y tristeza al dejar La Maestranza. "Estos días son felices y tristes a la vez", admitió. Capeó, sin embargo, la pregunta acerca de esa aparente ausencia insinuando que no era así: "Os lo habéis perdido", respondió. Efectivamente, nadie le vio en el glamuroso tendido.

Ahora sin el traje de luces y una vez entregada la montera, Cayetano seguirá respirando el aire del campo sin la mirada expectante y exigente de la afición. Una vida sin tensión en uno de sus lugares favoritos, El Recreo de San Cayetano, una exclusiva finca, próxima a Ronda, con olivares centenarios y abundantes recuerdos de esta dinastía taurina. Acaba de poner punto final también a su relación sentimental con la periodista portuguesa María Cerqueira, después de dos años de amor y titulares en la prensa del corazón.

El torero es padre de dos hijos. A Lucía Rivera, hija de Blanca Romero, la adoptó en 2001 cuando contrajo matrimonio con la actriz. Actualmente tiene 24 años y es modelo e influencer. El segundo lleva su nombre, Cayetano Rivera, y es fruto de su matrimonio con Eva González. Tiene 7 años.