Opinión

El diario de Amilibia: "Feijóo: derogando que es gerundio"

"No necesito la bola de cristal de Rappel ni las cartas de Esperanza Gracia para adivinar cómo será la dura vida de Feijóo en la Moncloa, si llega a ella"

El líder del PP, Alberto Núñez Feijóo en la sede del partido
El líder del PP, Alberto Núñez Feijóo en la sede del partidoDavid Mudarra

No necesito la bola de cristal de Rappel ni las cartas de Esperanza Gracia para adivinar cómo será la dura vida de Feijóo en la Moncloa, si llega a ella. Tendrá que pasarse toda la legislatura y la mitad de la siguiente derogando las leyes que aprobó y aún pueda aprobar Él. Tendrá que derogar la ley Sisí, la ley Trans, la ley de Memoria Democrática, la ley del Aborto, la ley de la Vivienda, la ley de la Sedición y la ley de Bienestar Animal, también conocida como la ley Guau Guau. Y alguna más que se me olvida. Dicen las lenguas viperinas que anda por los pasillos de Génova cantando al son de las gaitas: «Yo tendré que transformar/ todas las leyes sanchistas/ así me podrán nombrar/ el rey de los alquimistas».

Alberto Núñez Feijóo durante un pleno del Senado
Alberto Núñez Feijóo durante un pleno del SenadoGonzalo PérezLa Razón

No para ahí la cosa. Ece Temelkuran, ensayista turca que tuvo que abandonar Turquía por sus críticas a Erdogan, escribe: «Aunque los líderes populistas pierdan el poder, lo dejan todo contaminado». O sea, que además de derogar, toca descontaminar todo lo que Él ha dejado perdido de chapapote sanchista, y no creo que eso se vaya con aguarrás, amoniaco y estropajo Ajax. Pablo Echenique promociona su libro «Memorias de un piloto de combate». Podría haber añadido, ahora que se llevan mucho los títulos largos, «que nunca defenderá a Ucrania». El podemita acaba de confesar que «es imposible cambiar la sociedad sin mancharse las manos». Quien sabe de manchas, sabe de cepillados, purificaciones y purgas.

Con él a los mandos, y con Irene Montero en la redacción de la ley descontaminadora de sanchistas, todo quedaría como los chorros del oro en menos de una legislatura. Pero no creo que Alberto Núñez Feijóo los quiera ni como fijos discontinuos para descontaminar.