El duro testimonio de Inmaculada Casal en el que relata una versión de “violencia máxima”

Antonio Tejado sigue en la palestra mediática y conforme avanza la investigación trascienden nuevos datos de su caso. El sobrino de María del Monte fue arrestado por ser el presunto “autor intelectual” del robo que tuvo lugar el pasado mes de agosto. A raíz de que saliera a la luz no han dejado de pronunciarse fuentes cercanas a su entorno, como su pareja Samara, quien confía en su inocencia “al cien por cien”. También han sido muy comentados los siguientes pasos que dará su abogado para llevar su caso.

Uno de los puntos que más ha llamado la atención ha sido la manera de llevar a cabo el asalto. El pasado viernes fueron la propia María del Monte y su mujer Inmaculada Casal quienes declararon ante el juez para exponer cómo sucedieron los hechos. La reportera de “Vamos a Ver”, Rocío Romero, ha desvelado algunos detalles de sus declaraciones que han impactado por su rudeza. “En la declaración que hicieron María del Monte y su familia el pasado viernes, ellas han dado una versión de 'violencia extrema’”, algo que empieza llamando la atención sobre el caso, dado que el supuesto autor intelectual era el sobrino de la cantante.

“Inmaculada Casal ha llegado a decir que a ella la amordazaron, la pusieron boca abajo, le taparon la cara con una almohada (...). Esto es un detalle que contó el viernes ante el juez, pero que no había contado antes ante la Guardia Civil cuando se produjo el robo”, aseguró la colaboradora del mencionado programa. Unas declaraciones que, una vez han visto la luz, reflejan la difícil situación por la que están pasando y que aún les queda por vivir.

Por otra parte, este lunes ha tenido lugar el primer día de visitas de los familiares de Antonio Tejado en la prisión de Sevilla número 1. La primera en acudir ha sido María José, madre de Antonio, que lo ha hecho junto a la todavía pareja de su hijo, Samara. En un primer momento no han querido pronunciarse, aunque finalmente Samara se ha dirigido a la prensa para pedirles que respetaran que ella no era un personaje público ni pretendía serlo.