"No apto para aprensivos"
Nagore Robles muestra la cicatriz tras su doloroso paso por quirófano
La presentadora se ha operado de la espalda como consecuencia de un disco deshidratado y una hernia discal. El dolor era insoportable, pero ahora se recupera en casa
Nagore Robles ya ha recibido el alta médica y continúa la recuperación de su complicada operación de espalda desde la comodidad de su hogar. Después de pasar unos días ingresada y bajo cuidados profesionales, así como los de su “madre parlanchina” y una buena amiga, la presentadora ha podido continuar el proceso de sanación en casa, lo que en sí es muy buena noticia. Ha ido compartiendo día a día su avance médico, desde que fue diagnosticada con un disco deshidratado y una hernia discal, sus dudas sobre si pasar por quirófano y también cómo resultó tras ponerse en manos de los cirujanos. Ha soportado muchos dolores, pero espera que estos remitan con el avance de su recuperación. Mientras eso sucede, ha presumido de la cicatriz que ha quedado grabada en su piel a modo de prueba de su batalla.
La propia presentadora y colaboradora en programas de realities de Telecinco ha advertido a sus seguidores de que la imagen de su herida “no es apto para aprensivos”. Y es que ha decidido mostrar la cicatriz, aún con los puntos de sutura, en primer plano sin ningún reparo. Lo hace tan solo tres días después de ponerse en las manos de los cirujanos, que la convencieron de la necesidad de una intervención para paliar los fuertes dolores que le impedían mantener una vida con normalidad y que le mantiene alejada de los platós de televisión. Ahora que ha superado ese reto, tan solo le queda recuperarse, aunque también presumir de la marca que su batalla ha dejado grabada en su cuerpo a modo de recordatorio de la fortaleza de la que ha hecho acopio estos difíciles meses.
Además, Nagore Robles ha querido dar mayores detalles sobre cómo ha sido su delicada intervención de espalda, dándole las gracias a los profesionales que le han acompañado en este proceso: “Me ha transmitido mucha tranquilidad desde la primera consulta”, destaca sobre la neurocirujana María Pascual Gallego y su equipo. También ha detallado que la intervención duró casi una hora y media, que le ha dejado una cicatriz en la espalda: “Los puntos son internos”.
Y es que Nagore Robles tenía el nervio dañado, lo que le provocaba un gran dolor, provocado por la deshidratación de un disco y una hernia discal. “Ahora me toca reposar, recibir mimos, ser paciente y tomármelo con calma. Pero estoy segura de que opté por la mejor decisión, acabo de llegar a casa y no siento ningún dolor”, se alegraba de que las pastillas estén haciendo su efecto, después de pasar una mala noche en el hospital.
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