Entrevista

Toñi Moreno: «Ya me gustaría a mí ser Broncano»

La presentadora de Canal Sur nos habla de su aprensión a la cirugía estética, su admiración por Teresa Campos y la maternidad a los 50

La presentadora y escritora, Toñi Moreno
La presentadora y escritora, Toñi MorenoGtres

Todavía no son ni las ocho de la mañana y Toñi Moreno (El Prat de Llobregat, 1973) ya está contestando esta entrevista. La presentadora lleva en el gremio desde los 14 años, edad a la que empezó en Radio Sanlúcar, tras prometerle a su madre que así ayudaría en casa. De Pepe, su padre agricultor, aprendió que todas las peonadas suman. Las suyas pasan ahora por conducir «Hoy en día» y «Gente maravillosa», en Canal Sur. Además, pone su naturalidad al servicio de varias marcas. Moreno es tan de todos que hasta la BBC ha adoptado su coletilla de «eres una persona maravillosa». Ella, a estas alturas, aspira a ser verdad, buena amiga y la mejor madre para Lola.

Uno de sus puntos fuertes es su espontaneidad. A costa de ella, tuvo que pedir disculpas tras un comentario a una tiktoker. ¿Se piensa más lo de salirse del guion?

Bromeé sobre un miembro de mi equipo y no le sentó bien. Me equivoqué y pedí perdón. Lo que soy ahora es más prudente al gastar bromas. Hay que aprender de los errores. Si no eres una lerda.

Dos programas, imagen de varias marcas y una agencia de comunicación. Esto C. Tangana lo llamaría «ambición desmedida»….

(Risas) Lo que pasa es que soy madre soltera, tengo una niña a la que hay que poner grande y la vida está muy cara. Ahora hay que trabajar el doble para ganar la mitad que hace diez años. Me apetece hacer cosas diferentes. A mí me ha costado decir que no y nunca he visto que un trabajo fuera menos que otro. Teresa Campos ya decía que «no hay trabajo pequeño sino mal hecho».

Ha sacado una línea de cosmética. ¿Prefiere soluciones poco invasivas a un quirófano?

Soy una miedica para las operaciones estéticas. Que el resultado no sea el que espero hace que me paralice. Hasta ahora no me he hecho ninguna. Tengo un complejo con los pechos desde que tuve a la niña y me lo estoy pensando muchísimo.

Después de tantos años entrevistando celebridades ¿cuál es el número de teléfono más VIP de su agenda?

El más VIP no te lo puedo decir, pero sí que son gente muy normal. A mí me impresiona más la gente anónima que son ejemplo de vida.

Ha trabajado mucho en Telecinco. ¿Le gusta cómo se está reinventando?

Telecinco está en una dirección que me encanta. Lo que pasa es que un cambio implica ensayo-error. Ha sido mi casa mucho tiempo y si les va bien me alegraré muchísimo.

Tras la zapatiesta con el fichaje de David Broncano por TVE, ¿qué consejo le da al cómico y presentador?

Ya me gustaría a mí ser Broncano, la verdad. En este negocio vales lo que alguien está dispuesto a pagar por ti.

Reconoce que partidos de ideología diferente le han ofrecido entrar en política. Ya que sigue fuera del Congreso, ¿qué les pide a los que sí tienen escaño?

Que piensen que pagamos su sueldo y que su obligación es pensar en el bien común, no en el particular.

«Gente maravillosa» se ha convertido en un programa de referencia, cuya muletilla ha calado en la sociedad. ¿Prefiere hacer formatos amables?

Yo he hecho de todo, algunos que han sido para pagar la hipoteca, pero en todos he puesto alma, corazón y vida. «Gente maravillosa» es un regalo porque te reconcilia con el ser humano.

Dice que la maternidad en solitario le ha hecho relativizar cuando se siente culpable. ¿Cómo es tener una hija de cuatro años a los 50?

Mi hija me ha enseñado muchísimo. Lo único que quiero es que esté sana y, si me quedo sin trabajo, ya encontraré. Si no encuentro el amor, ya encontraré. No la tuve antes porque no tenía estabilidad económica. Siempre aconsejo que los hijos hay que tenerlos jóvenes, porque es una lucha. Yo estoy súper feliz.

Habla de María Teresa Campos como maestra. ¿Es el referente al que le gustaría parecerse?

De Teresa me habría gustado heredar esa verdad, ese olfato, esa manera de hacer entrevistas. Su hija Carmen me dice que me parezco y para mí es uno de los mayores piropos.

Por su amistad con famosos, le toca dar explicaciones cuando son noticia. ¿Cómo lleva ese protagonismo?

Antes me incomodaba más, ahora tengo claro que antes de nada soy amiga. Me ha pasado con María del Monte, que era la periodista que más información tenía y la que menos ha contado. Porque María me coge el teléfono porque la llamo como amiga. Es más importante su amistad que una exclusiva.

Apaga la tele siempre que....

Estoy jugando en el suelo con mi hija.