El diario de Amilibia: "Ayuso, guerrera y resucitadora"

Cual incansable fajadora en el ring de la política, Isabel Díaz Ayuso plantea su batalla contra Sánchez "golpe por golpe". Cree que el Apolo de la Moncloa quiere un Madrid "sin trenes, sin aviones de corta distancia, sin museos, sin instituciones y sin agua". Eso dice. Y añade: "Cuando piensas que Sánchez ya ha dado lo peor de sí mismo, siempre nos sorprende con una nueva afrenta hacia la región". No queda ahí la cosa: por el veto que sufrió en la inauguración del AVE Madrid-Asturias, ha decidido, con un par, "no invitar nunca al Gobierno a sus actos". Golpe por golpe y ojo por ojo. A este paso, el sanchismo se va a quedar sin canapés, cañas y torreznos, sin tardeo y terraceo.

En otra guerra, porque esto es un sinvivir, la Yoli quiere dejar a Nadia Calviño como una cayetana rezando el rosario en Ferraz. Anda diciendo a quien la quiera escuchar que "algunos miembros del Gobierno (mirada de reojo a Nadia) le recuerdan al lenguaje de la derecha del PP, que dice que la gente está en el paro porque quiere". Y todo por desavenencias en las ayudas a los parados. Visto lo de Israel, no creo que Nadia solicite a Sánchez que arbitre el combate, ni que Isabel recurra al diplomático salvadoreño Francisco Galindo para que medie en lo suyo con la Moncloa. Por cierto, desconozco si llegado el momento a Marisa Paredes le gustaría resucitar de la noche de los muertos en plan conde Drácula, pero si así fuera, le convendría invitar a su velatorio a la presidenta de Madrid. Seguro que nada más intuir su presencia, se levantaría del ataúd para gritar: "¡Qué hace esa aquí! ¡Fuera!".

Claro que así Ayuso aumentaría considerablemente su leyenda: guerrera y encima resucitadora. El no va más.